Socialistas y populares se han desmarcado del acto. Los socialistas porque apuestan por un encaje de Cataluña en España en el marco de un estado federal, como ha dicho hoy mismo el primer secretario del PSC, Pere Navarro, y los populares porque consideran al movimiento independentista como minoritario, como ha manifestado Enric Millo, su portavoz en el Parlament de Catalunya.

Un guiño de CiU
El resto de fuerzas catalanas sí han dado apoyo al acto y han estado presentes. Convergència Democràtica de Catalunya ha estado representada por los diputados Pere Macías y Josep Rull. Además, el secretario general del partido Oriol Pujol ha recordado que tanto Artur Mas como Jordi Pujol han votado en los referéndums independentistas. Un claro guiño del partido gobernante en Catalunya que en los días previos a su congreso está agitando el sentimiento independentista, entre otras cosas, para poner sordina a sus continuos pactos con el PP.

También estaba presente en el acto el alcalde de la federación nacionalista de Vic, Josep Maria Vila i Abadal, militante de Unió Democrática de Catalunya y principal rival de Josep Antoni Durán i Lleida en el próximo congreso del partido, que hasta ahora se ha mostrado en contra de la aventura independentista.

El actor Sergi López presentó el acto
La Asamblea Nacional por la Independencia constituida hoy en Barcelona no pretende convertirse en un partido político como ha afirmado el actor Sergi López que ha presentado el acto, y aspira a que se celebre un referéndum en el 2014. Hoy por hoy, este referéndum no se podría celebrar porque sería ilegal. CiU ha mantenido una postura ambigua sobre este tema. El propio presidente Mas se ha declarado independentista pero considera que celebrar la consulta ahora no sería oportuno porque no existen condiciones para ganarla.

El doble juego de CiU
Además los nacionalistas han esgrimido, por un lado, el pragmatismo para mantenerse en el poder pactando con el PP en Catalunya y dando apoyo al gobierno de Rajoy en el Congreso de los Diputados. Por otro, agita el sentimiento independentista con el argumento que España no da respuesta a las aspiraciones de Catalunya y así agitar los sentimientos nacionalistas de un amplio segmento de su electorado descontento con los pactos con los populares. El principal agitador de este argumento es el propio presidente Artur Mas y el núcleo duro del partido dirigido por Oriol Pujol.