Igancio Blanco, diputado de Esquerra Unida del País Valencià y portavoz de su grupo ante la Comisión de Economía, Presupuestos y Hacienda, ha reclamado al consejero de Gobernación, Serafín Castellano su dimisión por ser "el secretario general de un partido podrido de corrupción, responsable del saqueo y de la ruina de RTVV, de la manipulación y de la censura, de su desprestigio a pesar del esfuerzo de miles de trabajadores durante tantos años".

Lo ha hecho durante su intervención en la sesión de esta mañana sobre los presupuestos de 2014. "¡Qué vengüenza! ¿No les da vergüenza? ¿Por qué no dimiten? Ustedes vulneran el principio de igualdad y los derechos fundamentales de los trabajadores y las trabajadoras, cometen ilegalidades y ¿después quién lo paga? ¿Lo pagan ustedes? Lo vamos a pagar todos los ciudadanos del País Valencià", criticó con dureza.

El diputado acabó enfrentándose a los diputados del PP que le recriminaron sus palabras. "A mí imputados por corrupción no me mandan callar", espetó a Ricardo Costa, que tuvo que dimitir por recibir regalos de la Gürtel. Al igual que Camps, fue absuelto del delito de cohecho impropio en una polémica votación, aunque otros dos altos cargos fueron condenados tras autoinculparse de los mismos hechos. En resumen, un vodevil que no deja en demasiado buen lugar a la justicia valenciana.