El pasado mes de abril, la Junta Municipal del Distrito de Chamberí aprobaba con la mayoría del Partido Popular (PP) y no poca polémica que el nombre de Mario Vaquerizo quedara grabado en una placa de la zona.
Pasó poco más de una semana desde que se debatiera la situación para el cantante de las Nancys Rubias hasta que el homenaje pasara a convertirse en realidad. Sin embargo, el ejemplo del artista -al que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, sitúo como un icono de la Movida Madrileña a pesar de que cuando éste movimiento ocurrió él era pequeño- fue solo un caso más de la distinción que hace la derecha en materia cultural en la capital.
Son muchos los casos en los que ha quedado patente la prisa que se da Cibeles para rendir culto a según qué personas frente a la tranquilidad con la que se toma los actos conmemorativos a otras personalidades. Esto es lo que trae de nuevo a colación y de manera exclusiva ElPlural.com, en su caso con dos nombres tan ilustres como el de Arturo Soria y Clara Campoamor.
El urbanista y la política, olvidados por el PP
La ciudad aprobó por unanimidad el reconocimiento como Hijos Predilectos de ambos iconos madrileños en 2021 y 2022 respectivamente, pero a día, cuatro y tres años después, todo sigue en stand by, tal y como ha adelantado el PSOE de Madrid (PSOE-M) a este periódico. De hecho, la formación de Reyes Maroto va a llevar el tema a la Comisión de Cultura, Turismo y Deporte que tendrá lugar el próximo martes.
El responsable de Cultura y concejal socialista Jorge Donaire expresa a este medio su descontento con la actuación del Consistorio; una dejadez sobre la que pedirá explicaciones la semana que viene en sede parlamentaria ante el oscurantismo del equipo de Almeida.
“Tuvimos conocimiento de que los reconocimientos no habían finalizado e indagamos para intentar conocer dentro del Ayuntamiento los motivos, pero nadie nos ha dado información precisa, ni siquiera cuando hicimos una petición de información formal de los expedientes de ambos expedientes”, relata en conversación telefónica. “Hemos confirmado con ambas familias que no se ha hecho absolutamente nada, y por todo ello lo llevamos la comisión”, añade.
El concejal refleja que se trata de “dos procedimientos distintos”, pero que los dos “se aprueban por unanimidad”; uno en enero de 2021 y el otro en octubre de 2022. “El de Clara Campoamor, además, fue a petición nuestra”, refresca. Asimismo, ya en cuanto a los pormenores de la situación, el responsable del departamento cultural del partido a nivel local acentúa que el reconocimiento de Soria, debido a un cambio, se rige por un reglamento de finales de los 60, mientras que el de Campoamor por uno de 2022.
En cualquier caso, para los dos “debe haber un acto solemne” con la entrega de las “correspondientes distinciones” (diploma e insignia o solo insignia). “No sabemos si obedece a una falta de conocimiento en tanto en cuanto desconocen que el asunto sigue abierto, o tiene que ver, otra vez, con la falta de compromiso y eficacia en el trabajo a las que nos tiene acostumbrados el Ayuntamiento, pero nos ha sorprendido bastante porque han pasado cuatro años”.
Sorprende, sobre todo, porque el propio Partido Popular reconoció que se trata de personas que, originarias de Madrid, dejaron su huella en la ciudad y otras partes del país e incluso del mundo. “Sin saber si se corresponde con un error, lo que es seguro es que cuando se produce un reconocimiento de este tipo el Gobierno municipal no tiene margen (…) Debe actuar en nombre de la ciudadanía y por la voluntad colectiva”, subraya.
Con la mirada puesta en el próximo martes, la voz que habla para estas líneas confía en que ese reconocimiento llegue “de una vez por todas” y con la “máxima celeridad posible”. “Parece que la gestión cultural del PP en Madrid sigue un patrón que se caracteriza por la ineficacia y la distinción”, asevera, refiriéndose a otro caso que muestra ese ‘sectarismo’ popular: el de la actriz Marisa Paredes.
Cabe recordar que el Ayuntamiento rechazó homenajear a la intérprete, y en esta última línea en la que se pronuncia Donaire: “Mientras vemos la celeridad para ejecutar otras decisiones como placas de Chamberí en días, pasan años para reconocer a según quienes”.
