En una reciente entrevista con laSexta, Esperanza Aguirre, la exlíder del Partido Popular en Madrid, ha compartido sus opiniones tras la confirmación de Pedro Sánchez de continuar en su cargo como presidente del Gobierno. Así, Aguirre ha expresado su convicción de haber predicho correctamente el resultado, señalando que Sánchez se mantendría en el poder, se posicionaría como víctima y atribuiría la responsabilidad de los ataques personales que percibe a jueces independientes y periodistas. Unas declaraciones que han provocado un tenso encontronazo con Gonzalo Miró, uno de los tertulianos del mencionado espacio.
“Yo he acertado todo, en que se iba a quedar, en que se iba a hacer la víctima y en que lo que quería de verdad era echar la culpa a los jueces independientes y a los periodistas que publican las noticias de lo que él considera que es un ataque a sí mismo”, ha subrayado la expresidenta madrileña en ‘Más vale tarde’, el programa de laSexta que presentan Iñaki López y Cristina Pardo.
Asimismo, Aguirre ha sostenido que es deber de la oposición criticar al Gobierno y acusa a Sánchez de querer modificar la composición del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para influir en la designación de jueces.
Por otra parte, Aguirre también ha advertido que, aunque aún no se ha llegado a una situación comparable con Venezuela, es una dirección que tanto Sánchez como el expresidente Zapatero parecen favorecer: “No ha conseguido todavía llevarnos a Venezuela, a pesar de que es lo que se propone, él y Zapatero”.
Tras estas acusaciones, Iñaki López, ha ironizado sobre la situación política actual comparándola con la ausencia de la organización ETA, en un intento de subrayar la gravedad de las acusaciones de Aguirre: “Yo echo de menos ETA”.
Por otra parte, como se señalaba en las líneas anteriores, en respuesta a las declaraciones de Aguirre, Gonzalo Miró ha recordado a la expresidenta madrileña que la renovación del CGPJ estaba prevista por la Constitución hace cinco años, y no es simplemente un capricho del actual presidente. “Tocaba cambiar el CGPJ hace cinco años, no es que quiera […] Lo dice la Constitución, aunque a Esperanza Aguirre no le termine de gustar”, ha señalado.
El anuncio de Sánchez de no dimitir
Ha sido a las 11 horas de este lunes cuando Pedro Sánchez, tras cinco días en silencio y sin aparecer públicamente, después de lanzar una carta a la ciudadanía en la que se planteaba si merecía la pena el acoso y derribo que tanto él y su familia estaban sufriendo a cambio de estar en la presidencia del Gobierno, cuando ha anunciado su decisión final: no dimitir y seguir luchando por la democracia.
“He decidido seguir, con más fuerza si cabe, al frente de la presidencia del Gobierno de España”, ha pronunciado, después de haber expuesto los motivos que le han llevado a ello, que no son más que no ceder ante el acoso y los ataques a la democracia. “Asumo ante ustedes mi compromiso de trabajar sin descanso, con firmeza y con serenidad por la regeneración pendiente de nuestra democracia y por el avance y la consolidación de derechos y libertades”, ha reafirmado.
En el mismo sentido, ha añadido: “Pongamos fin a este fango de la mejor manera posible, mediante el rechazo colectivo, sereno, democrático, más allá de las siglas y de las ideologías, que yo me comprometo a liderar como presidente del Gobierno de España”. Y es que desde el pasado miércoles, Sánchez se preguntaba y ha reiterado este lunes si “merecía la pena soportar el acoso que, desde hace diez años, sufre mi familia a cambio de presidir el Gobierno de España”.
“Si aceptamos todos como sociedad que la acción política permite el ataque indiscriminado a personas inocentes, entonces no merece la pena. Si consentimos que la contienda partidista justifique el ejercicio del odio, la insidia y la falsedad hacia terceras personas, entonces no merece la pena. Si permitimos que las mentiras más groseras sustituyan el debate respetuosa y racional basado en evidencias, entonces no merece la pena”, ha expuesto.
En su declaración desde el Palacio de la Moncloa, Sánchez también ha mostrado su parte más personal, como ya lo hizo en la carta difundida el miércoles, elevando a la máxima prioridad el amor que siente por su mujer, Begoña Gómez. Bajo esta premisa, el líder del Gobierno ha dejado claro que “por muy alto que sea, no hay honor que justifique el sufrimiento injusto de las personas que uno más quiere y respeta ni ver como se intenta destruir su dignidad sin el más mínimo fundamento”.
No obstante, ha señalado que es consciente de que “esta campaña de descrédito” no parará. Pero pese a ello, ha enfatizado: “Podemos con ella. Lo importante, lo verdaderamente trascendente, es que queremos agradecer de corazón las muestras de solidaridad y de empatía que hemos recibido, de todos los ámbitos sociales”.
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