A pesar de que hace solo dos semanas que Anabel Pantoja ha regresado a Sálvame tras cuatro meses de ausencia, su vuelta ha coincidido con un bombazo: su ruptura sentimental con Omar Sánchez tras poco más de cien días de boda.

"Hoy no es una tarde sencilla para ti, ¿lo sabes no?", le preguntaba Jorge Javier Vázquez al encontrarse con ella. "Sí, pero es que va a ser la última. Lo siento", respondía ella tras escuchar a los colaboradores. "¿Qué quieres decir que te vas?", le decía cambiando el tono el presentador. «Sí, decidido y hecho. Como mi separación. Vamos al plató que tengo ganas de encontrarme con algunos colaboradores y despedirme de ellos. Además que lo tenía ya pensado si esto se convierte en una cosa. Cirquitos no", aseguraba ella muy cabreada.

Sin tomarle en serio, Jorge Javier bromeaba con que cada vez rompe más récords al haber vuelto hace pocos días y querer marcharse ya. "Como los realitys que entro y me echan a los tres días. Yo entiendo que se hable, que soy pública y que tengo que dar explicaciones. Creo que no he podido ser más honesta y sincera, pero como creo que no voy a soportar esto y no quiero pelearme con nadie, prefiero irme a mi casa", comentaba sobre los motivos.

"Y la separación la vivís comentando vosotros y cuando me eche novio o amigo ya os enteraréis. Yo no voy a venir todos los lunes y martes para justificarme porque no me apetece y me van a decir pues para eso estás trabajando aquí, pues ya no trabajo aquí", le exponía Anabel Pantoja, visiblemente cansada tras haber escuchado a Rafa Mora y a Laura Fa comentar cómo había "desvalijado" la casa en la que vivía con su todavía marido al cesar la convivencia.

Al ver que iba en serio, el presentador le pedía que se calmara. "Ahora está la espuma aquí arriba. Ahora no te van a parar de salir novios hasta que esto se vaya estabilizando como la ola pandémica", le explicaba para que bajara el tono. "Cuánto tiempo llevan hablando de mi tía, y ella ha hecho cosas, ha hecho exclusivas. Yo me defiendo pero ella en su casa. Me pongo en su cabeza y no lo aguanto. No puedo con las injusticias", le decía ella.

"Me parece muy bien los pinganillos y hay que crear contenidos. Pues que hablen de Marta Riesco, del penas, de Iñaki. A mi no me interesa estar aquí por mi salud mental. Me fui mal y volví. Parece que soy la Puerta de Alcalá que todo el mundo pasa por ahí. Yo puse unos límites y si esos límites se traspasan porque este programa se dedica al cotilleo, a investigar, pues me voy. Estoy encantada de trabajar aquí pero no. Me parece lícito pero como no lo voy a soportar porque me duele, me duele Omar, me duele la familia, pues me voy a mi casa", comentaba sobre el programa.

Su última tarde

Mientras tanto, el presentador le insistía en que reflexionara y no tomara decisiones precipitadas en caliente. "Es la última y quiero pasarlo bien. Ya está decidido. No me compensa. Os echaba un montón de menos, no tenéis culpa pero hay unos límites. Es que se está afirmando que estoy con un policía, que es un chico anónimo. Y Omar tiene que estar con una chica por fuerza. Que es lo lógico que hagamos nuestra vida. Tu eres más famoso que yo y no se habla de tu vida privada. Yo prefiero estar en mi casa, en mi cueva y si salen las informaciones que las contrasten. Yo vengo de colaboradora, me preguntáis como estoy, pero no voy a hacer un parte meteorológico de todo. Aquí se ha separado un montón de gente de la cadena y ahora tengo que contar yo todo", decía ella muy triste.

"Yo he venido aquí porque necesitaba que mi mente se despejara y que me iba a venir bien, por supuesto se cobra un dinerito que me viene bien, pero yo esto no lo aguanto", terminaba diciendo sobre el tema. Tan en serio iba que ha acabado comprando los vuelos para este martes a las 11:30 horas a Canarias y así no acudir a trabajar.