Ana Rosa Quintana se ha hecho eco del problema del acceso a la vivienda y el auge de los pisos turísticos en las principales capitales este martes desde ‘TardeAR’. Sin embargo, ha tomado como referente a un falso casero que ha logrado facturar más de un millón de euros gestionando más de 300 inmuebles vacacionales.

La presentadora del programa vespertino de Telecinco ha dado altavoz a Francisco Martínez, un falso casero que se hace cargo de más de 300 pisos turísticos en Madrid. Tal y como se inscribe en su perfil de pareja de la plataforma de Airbnb, ‘Fran y Marta’, y del que se ha hecho eco 'El Confidencial', el empresario factura más de un millón por medio de una sociedad, es decir, no son dos particulares como aparece en el portal urbanístico.

La periodista, para dar contexto a la cuestión de la vivienda en la capital, ha introducido en estos términos al falso casero para conectar con él en directo durante su programa: “Les voy a hablar de Fran y Marta. Es una pareja aparentemente normal, su mayor pasión es ver crecer a su hija, jugar con sus dos perritas… Lo realmente llamativo de esta pareja idílica es que tienen más de 300 pisos sólo en la Comunidad de Madrid. Un número tan alto que hace que puedan jugar con los precios del alquiler de toda la capital según los turistas que vayan viniendo”, ha expresado a modo de introducción.

Y es que ha sido en estos términos como Quintana ha ensalzado la “operación de marketing” que han llevado a cabo la pareja, que no es más que un espejismo en el que aparentan ser particulares donde en realidad hay una empresa, para hacer negocio inmobiliario.

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Cuando ha tomado la palabra, el invitado estrella del programa de Telecinco ha expresado que tan sólo tiene en propiedad “un pequeño apartamento hipotecado”, restándole importancia a la vez al inmenso negocio del que es gestor: “No se gana tanto, hay mucho falso rico con alquiler vacacional”, ha subrayado.

“En Madrid hasta 2019 teníamos 13.000 apartamentos que eran legales”, ha continuado el falso casero, condenando así la decisión que adoptó entonces el Ayuntamiento de Manuela Carmena. La presentadora, tratando de entender la exposición del invitado, ha añadido: “Entiendo que al final hay mucha presión y se terminará regulando”.

No sin antes de despedir la conexión en directo, Quintana sólo ha expresado halagos para con el modo de vida de su invitado: “Empezó él solito con su apartamento y ahora tiene 70 empleados, o sea que, como empresario, enhorabuena”, ha concluido.

El negocio del falso casero que alaba Ana Rosa

Tal y como ha desgranado el medio citado en líneas anteriores, esta pareja se presenta en Airbnb como un proyecto de familia modélica, pero la realidad es que, detrás de esta minuciosa presentación se encuentra una empresa que gestiona cerca de 300 pisos en alquiler en Madrid.

En solo tres años de funcionamiento, la pareja, bajo su sociedad, se han hecho con el control de cerca de 400 inmuebles en todo el país, no sólo en Madrid. Un montante con el que generan una facturación de más de un millón de euros.

En declaraciones al citado periódico, el falso casero defiende que es un negocio “familiar” y que no siempre se dedicó al mundo inmobiliario. A su vez, justifica su presencia en la plataforma bajo una estrategia de marketing que le está dando los frutos mostrados.

Cabe remarcar que Fran, el falso casero, defiende que sólo gestiona pisos de propietarios individuales, en ningún caso de propiedad de fondos de inversión. No obstante, el 92% de ellos opera sin la licencia necesaria, es decir, 25 de los que se muestran en la plataforma online, dan cuenta de su número de autorización; el resto, con la ordenanza que aprobó el Ayuntamiento en 2022, podrían ser clausurados en cualquier momento.

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