Las víctimas del conocido como el pistolero de Tarragona han anunciado que van a reclamar indemnizaciones después de que este recibiera la eutanasia. Marin Eugen Sabau, más conocido por este sobrenombre, ha muerto este martes tras la aplicación de este procedimiento médico asistido en el Hospital Penitenciario de Terrassa, un fallecimiento que se produce antes del cierre de la instrucción del caso y de la celebración del juicio. Esto ha provocado que algunos de los afectados por su ataque hayan decidido continuar su lucha para recibir una indemnización por los daños causados.

Sabau, que trabajada de guardia de seguridad, irrumpió en las instalaciones de su empresa en Tarragona el pasado 14 de diciembre tras ser despedido y disparó a tres de sus antiguos compañeros, causándoles diversas heridas. Tras este asalto a mano armada, el hombre se dio a la fuga en una huida que duró varias horas y en la que tiroteó a dos mossos d'Esquadra en un control. Después se atrincheró en una masía abandonada del municipio de Riudoms.

En la persecución, que necesitó la mediación del Grupo Especial de Intervención de la policía autonómica de Cataluña para neutralizarlo, el atacante resultó herido de gravedad al perder una pierna y quedó tetrapléjico. Esto le provocó una dependencia y unos dolores "constantes e insoportables sin posibilidad de alivio" -según la Audiencia de Tarragona- que le han llevado a solicitar la eutanasia. 

Los mossos piden compensación

Tal y como explica a 20minutos Albert Palacio, portavoz del sindicato de la Policía catalana USPAC, los dos agentes heridos durante la fuga de Sabau han manifestado su intención de pedir una compensación por la ofensiva. "Uno de ellos sufrió contusiones y rasguños en el ataque, pero el otro resultó herido de bala en el brazo y habría muerto desangrado si su compañero no le hubiera practicado un torniquete. No obstante, en ambos casos consideramos que hay tentativa de homicidio", ha afirmado. 

Con todo, la obtención de una indemnización se ve comprometida debido a la falta de juicio contra Sabau, sin embargo no es imposible. Según ha explicado en una entrevista en TV3 José Antonio Bitos, el abogado del sindicato que representa a los dos mossos, es posible acudir a la Generalitat a reclamar esta compensación "sin discusión" con una sentencia que fije esta reparación y con un condenado insolvente. Sí debe producirse, en cambio, una "valoración pericial" y recurrir "a la vía contencioso-administrativa" cuando no hay un fallo.

Bitos ha manifestado que esta indemnización podría alcanzar los 60.000 euros para cada víctima aunque la cantidad total depende de baremos establecidos en función de diferentes criterios, como "intervenciones, gravedad, secuelas...". Cabe destacar que el agente más afectado por los disparos continúa en rehabilitación. "Ha estado muy mal. Ha pasado por tres intervenciones y no sabemos si tendrá que someterse a alguna más. De momento, está en rehabilitación y desconocemos si sufrirá alguna secuela", señala el portavoz.

El caso de los tres trabajadores

En cuanto a los tres trabajadores de la empresa, esta situación es más complicada debido a que no se tratan de empleados públicos. "Probablemente quedarán en un limbo de demandas durante años y años. Los seguros dirán que no les compete porque no hay condenado, ellos argumentarán que son víctimas... Supongo que pasará a un juzgado civil que algo dictaminará", ha dicho Palacio en la misma entrevista.

Eugen se ha convertido de esta manera en el primer preso en nuestro país que muere por eutanasia. Todo sin haber sido juzgado de los delitos que se le imputaban: cuatro intentos de homicidio, atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas. Ante un futuro postrado en una cama de la cárcel, solicitó poder acabar con su vida de manera asistida. Además, el pistolero no ha manifestado en ningún momento su arrepentimiento por los hechos ni ha solicitado perdón a las víctimas, según ha señalado este lunes una magistrada de Tarragona, que denegó su puesta en libertad para morir en un centro hospitalario.