Un hombre de origen rumano se ha encaramado a la fachada de la catedral de Murcia y ha amenazado con tirarse al vacío, a la plaza del Cardenal Belluga, porque, presuntamente, le habían estafado. El sujeto exigía hablar con el cónsul de Rumanía, 3.000 euros y un bocadillo.

La Policía Local de Murcia y la Policía Nacional configuraron rápidamente un dispositivo de seguridad. Además, se han desplegado las ambulancias y efectivos de bomberos.

Finalmente, los efectivos de seguridad han logrado mediar con él para que bajara del edificio y se pusiera a salvo.