Seguidores de Alvise Pérez y su partido Se Acabó la Fiesta han propiciado graves insultos y amenazas contra la jueza que investiga a Vito Quiles, agitador ultra y jefe de prensa del ahora eurodiputado.

Al conocer que la titular del Juzgado de Instrucción 18 de Sevilla ordenó el pasado mes junto a la Policía Nacional la detención de Quiles, canales de Telegram y redes sociales señalaban a la titular y llenaban los espacios de internet de amenazas, incluso de muerte.

En ese sentido, se han visto palabras y declaraciones que rebasan todos los límites como “puta”, “asquerosa”, “choriza” o “a meter en la cuneta”, a la vez que estas personas pedían el “nombre de la jueza y dirección”.

Querella contra Vito Quiles por injurias y calumnias

La detención llegaba para que Quiles acudiera a declarar por la querella que el secretario general de Facua, Rubén Sánchez, le había interpuesto por injurias y calumnias. En concreto, según el reato de éste, “el corredor de los cien metros bulo Vito Zopperalli Quiles debió leer el montaje que me hicieron para hacer creer que tengo tendencias pedófilas y lo versionó deslizando que soy un pederasta que acosa a niñas en los colegios”.

La detención finalmente no se produjo, pero Alvise Pérez utilizó los hechos como arma arrojadiza, llegando incluso a ordenar a la jueza que retirara la orden contra Quiles bajo la amenaza de publicar “cosas sobre la definición del término soborno”.

Denuncia contra Alvise Pérez por "represión a la función jurisdiccional"

El escenario ha derivado actualmente en la petición por parte de la jueza a la Fiscalía para que presente denuncia contra Alvise Pérez, algo que no ha quedado sin respuesta por parte de este último, quien ha emplazado a “explicar a algunos jueces que no están encima por la ley”. “No pasa nada; nosotros os lo explicamos”, ha dicho a la vez que agitaba el fantasma del “lawfare socialista”.

La noticia que ha movido aún más el avispero es esta última, correspondiente con una información de hace unos días, cuando se conoció que la jueza de la ciudad hispalense, encargada de investigar a Vito Quiles por injurias y calumnias contra el portavoz de Facua, había solicitado a la Fiscalía del Tribunal Supremo que denunciara al líder del partido que desde el pasado mes de junio cuenta con representación en el Parlamento Europeo por amenazas contra ella; unos comentarios cuanto menos despectivos -por calificarlos de la manera más amable posible- que el agitador de extrema derecha puso a través de su canal de Telegram, en el que cuenta con más de 700.000 seguidores.

Es, por tanto, a raíz de la investigación a Vito Quiles que surge el episodio ocurrido con Alvise Pérez. La base de todo se encuentra al inicio del verano, cuando la magistrada pidió a la Policía Nacional localizar al jefe de gabinete de Se Acabó la Fiesta y tomarle declaración a partir de la querella de Rubén Sánchez.

Debido a un error, en un primer momento se solicitó el arresto a Quiles, aunque desde el juzgado matizaron que los agentes solo tenían que localizarle para poder notificarle la apertura de la causa contra él. Durante este periodo, el agitador ultra publicó dos mensajes contra ella ordenándola la rectificación de sus decisiones judiciales bajo la amenaza de publicar cosas “sobre la definición del término soborno”.

En el mensaje emitido, se daba “24 horas a la juez para que rectifique el auto de la detención de Vito Quiles y que diga que es un error y que solo pide averiguar su paradero”. “Es una orden criminal e inaceptable”, destacaba en su canal de difusión. Este era un primer mensaje, al que siguió otro en el que aseguraba que había hablado con la jueza para trasladarle el mensaje.

Fue a partir de las dos publicaciones con lo que la jueza entendía que Alvise Pérez podía haber incurrido en “amenazas y represión a la función jurisdiccional” y remitía al TS los mensajes, dado que es el tribunal con competencia para investigarle por su condición de eurodiputado. En lo que respecta a Vito Quiles, está citado a comparecer el próximo 25 de noviembre algo antes del mediodía por injurias y calumnias al mencionado portavoz de Facua.

Lo cierto es que este modus operandi de los seguidores de Alvise Pérez no es nuevo, ya que muchos de los usuarios que forman parte de los canales de difusión del ahora político en el Parlamento Europeo acostumbran a verter comentarios graves contra la migración, jueces o periodistas, entre otros, que no comulgan con sus ideales.