El pasado lunes, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones propuso a los agentes sociales una nueva modalidad de reincorporación laboral denominada "alta progresiva" dirigida a trabajadores que se reincorporen a su puesto de trabajo tras una baja médica de más de seis meses y hubiera sido derivada por determinadas patologías.
De acuerdo con la propuesta remitida a la patronal y sindicatos, esta reincorporación progresiva al trabajo solo se produciría cuando el trabajador haya recuperado la salud y tras recibir el alta médica, ya que, según palabras de la ministra Saiz, ”la finalidad de ésta nueva alta es asegurar la salud del trabajador, por lo que la medida será voluntaria y estará bajo supervisión médica”.
La medida, que actualmente se está negociando en la mesa de diálogo social, permitiría a los empleados reincorporarse al trabajo de forma gradual, trabajando media jornada durante un período máximo de 30 días, mientras perciben simultáneamente el 50% de su salario y el 50% de la prestación por incapacidad temporal.
Según la Ministra Elma Saiz, con esta nueva regulación se busca facilitar la transición al entorno laboral tras bajas prolongadas, especialmente en casos de enfermedades graves como el cáncer o accidentes cerebrovasculares, donde una reincorporación paulatina puede ser beneficiosa para la recuperación del trabajador.
En el supuesto de baja médica de trabajador pluriempleado, es decir, de alta laboral en más de una actividad, podrá ser dado de alta médica en una de sus actividades (siempre que a juicio médico pueda realizarla) y continuar de baja médica en la otra actividad.
Pero en la propuesta del Ministerio, además de tratar las altas progresivas, el documento contempla la posibilidad de que las mutuas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales puedan emitir altas médicas en cualquier momento del proceso de incapacidad temporal, lo que aumenta la capacidad competencial de estas entidades colaboradoras.
En relación a esta cuestión, conviene recordar que en la actualidad, la práctica totalidad de los procesos de baja médica causados por enfermedades profesionales o accidentes de trabajo son competencia de las mutuas y la gran mayoría (dos de cada tres) de los procesos de enfermedad común también. Es decir, el control de casi todas las bajas médicas de los trabajadores de nuestro país están en manos de las mutuas.
Veremos a ver cómo finalizan las negociaciones y qué efectos tendrá esta nueva regulación sobre la salud de los trabajadores. ¿Será una medida que ayude realmente al trabajador a reincorporarse de manera menos traumática o, por el contrario, supondrá mayor presión al trabajador para que vuelva al trabajo lo más pronto posible sin estar plenamente recuperado?
