Un menor de 12 años se encuentra en estado crítico en la UCI del Hospital Materno Infantil en Málaga. El niño se había precipitado por el balcón de un segundo piso en la zona de Las Lagunas de la localidad de Mijas casi a la 1.00 horas tras las llamadas de Emergencias 112 Andalucía.

Varios testigos llamaron a los servicios de emergencias tras la situación del menor, según un familiar, el niño presentaba mucha fiebre y delirios. Desde ese momento, el aviso llegó a la Guardia Civil, a la Policía local y a los servicios sanitarios que ingresaron al menor en el malagueño Hospital Materno.

El niño presentaba mucha fiebre y delirios 

La investigación de la Guardia Civil apunta que el menor estaba sufriendo un delirio acompañado de una fiebre alta. Fuentes de los agentes señalan que “tenía alucinaciones febriles” y que “ocurre más frecuentemente de lo que creemos”, según ha recogido el diario Málaga Hoy.

El menor se encuentra ingresado en la zona de cuidados intensivos en estado crítico con politraumatismo grave y a la espera de su evolución, según informa la Agencia Efe.

Un menor de dos años en estado crítico

Un menor de dos años también se encuentra en estado grave en el mismo centro hospitalario. El niño había sido ingresado por ahogamiento tras haber sido encontrado en una piscina en la localidad de Estepona.

El incidente sucedía a las 13.15 horas cuando Emergencias 112 Andalucía recibía el aviso de que un menor “se había ahogado” en la piscina de una urbanización. En el momento del aviso, se trasladaron los servicios sanitarios, la Policía Nacional y local. El niño ya se encontraba fuera del agua cuando el operativo desplegado había recibido la llamada.

El menor ahora se encuentra en estado crítico en la UCI de Pediatría del centro, según han confirmado fuentes sanitarias a la Cadena SER Málaga.

 ¿Qué hacer en caso de delirio febril infantil?

La fiebre es una reacción natural del cuerpo para combatir las infecciones provocadas por las bacterias, lo que activa las defensas en forma de escalofríos, dolores de cabeza o la pérdida del apetito, entre otros síntomas. La pediatra Victoria Rodríguez de la Rúa, en una entrevista con Infosalus, señala que estos delirios se producen “por una inadecuada actividad cerebral porque la fiebre puede hacer más vulnerable al cerebro y se altera el proceso normal de envío y recepción de señales del mismo”.

Estos episodios son los que más preocupan a los progenitores, pero para tratarlos hay que mantener la calma. Por ello, la pediatra indica que lo más importante es que los padres vigilen al menor “como siempre hay que hacer con todo niño febril”. “Deben hablar e intentar tranquilizar a su hijo, sin intentar razonar con él”, dice de la Rúa.

Asimismo, entre los consejos de la pediatra señala que “hay que evitar que se haga daño en esos momentos de confusión” y que es relevante que “no aparezcan signos de alarma como que el episodio de delirio se mantenga en el tiempo”.

Según Neuropediatriaytdah, las convulsiones febriles son “el trastorno neurológico más común en la lactancia y primera infancia”. Desde el medio señalan que se trata del “evento convulsivo más frecuente en humanos” y que el primer punto a abordar es “explorar detenidamente al niño y buscar el foco de la fiebre”. Asimismo, es importante descartar las afecciones graves o aquellas que afecten al sistema nervioso central.