La pandemia se está cebando en Andalucía con sus trabajadores sanitarios. Con datos oficiales de la propia Junta de Andalucía, y en plena fase de aplanamiento de la curva de afectados, son aproximadamente 3.000 el número de sanitarios afectados por Covid-19 en la región, un porcentaje a todas luces muy alto. Se sospecha que el número de profesionales positivos aumentaría si se aplicasen los test de detección de la enfermedad a todos los profesionales.
Numerosos contagios de profesionales en el “Macarena” de Sevilla
Un caso de especial virulencia en Andalucía contra los profesionales es el caso de Hospital “Virgen Macarena”. Con una plantilla que supone el 21,2% del total del SAS en la provincia, se encontrarían afectados el 45,4% del total de sus profesionales. Este caso ya fue denunciado desde Elplural.com el pasado 31 de marzo bajo el título” Denuncian la nefasta gestión del Hospital Virgen Macarena: 200 profesionales “en estudio”, se señalaban las 15 razones para la dimisión o cese del Director Gerente defendidas por el Sindicato Medico de Andalucía.
Esta grave situación de uno de los mayores centros sanitarios de la región ubicado en Sevilla, parece que no es única y que existen más casos en otras provincias. Es el caso ahora de Jaén del que nos informan fuentes conocedoras de las distintas realidades de contagio y riesgo del personal sanitario en la comunidad autónoma.
Un hospital de referencia en Jaén, también con alto riesgo
El Hospital Universitario de Jaén es un centro hospitalario de referencia de la provincia con una plantilla de 3.000 trabajadores. Como todos los profesionales sanitarios españoles su personal está literalmente volcado en la labor de combatir la pandemia.
Falta de medios y afectación también a UCI Neonatal o Pediatría.
Son muchas las críticas a la dirección del hospital porque según estas fuentes “no se están llevando a cabo los protocolos de protección”. Dichas críticas de los profesionales sanitarios se centran principalmente en la falta de medios materiales tales como equipos de protección, batas, gafas, mascarillas hospitalarias… Llama la atención que la censura se extiende no solo a las áreas sanitarias que se ocupan directamente de enfermos de la pandemia sino que también llegan a servicios como UCI Neonatal o Urgencias de Pediatría.
La cuestión es que a partir del Decreto de estado de alarma por el que extreman medidas en el ámbito hospitalario, entienden que estas no se han aplicado con la urgencia que se exigía a toda la plantilla de hospital desde médicos, enfermeras, auxiliares de enfermería, celadores a personal administrativo y de servicios generales. Se critica que desde la dirección del hospital no se están llevando a cabo los protocolos de protección contra el contagio y, día tras día, ven como trabajadores manifiestan síntomas compatibles con la aparición del Covid-19. Mientras, estos profesionales de la sanidad, continúan asistiendo a su trabajo en el hospital sin que los Servicios de Salud Laboral, que tienen la competencia al respecto, valoren o estimen la necesidad urgente de hacer el test para quién lo solicita. Argumentan desde la dirección que no ven necesidad si no hay fiebre. A veces confiesan que “están desbordados y que no hay test” ni para los profesionales del hospital.
“Incomprensibles argumentos”, siempre verbales, para negar los test
Cuando a esto trabajadores se les practica el test por el agravamiento de su estado (a los 15 ó 20 días en la mayoría de casos que se conocen) se confirma el positivo y estos pasan a estar de baja laboral. La gravedad de la situación consiste en que al resto de profesionales que han estado en contacto directo en el mismo turno se les niega el test. Califican como “penoso e incomprensible” el argumento que se les transmite -de manera verbal para que no haya constancia oficial- de que no es necesario para el resto si no se tienen síntomas como fiebre durante varios días. Asisten al hecho de ver cómo se continua trabajando apareciendo cada día más compañeros y compañeras que han dado positivo”, nos comentan. Y lo más grave es que se continua sin adoptar medidas para el resto, más aún cuando sucede que prácticamente la totalidad de la Unidad de Salud Laboral está de baja al haberse confirmado positivo en COVID-19.
Un dato más que ahonda en la grave situación derivada de los contagios de profesionales en este gran hospital de Jaén es el hecho que más de la mitad de la estructura directiva e intermedia de Enfermería (jefaturas de bloque y supervisores) se encuentran de baja por positivo. Incluso algunos casos se hayan ingresados en el hospital. Es el caso del Servicio de Farmacia del que 17 profesionales han dado positivo, casi el 50% del total del servicio.
Decisiones “extremadamente temerarias”
Las fuentes informantes, conocedores del estado de la sanidad en la provincia y en el resto de centros hospitalarios de Jaén y Andalucía, consideran “extremadamente temerario” que tras la aparición de varios positivos del virus en servicios como Hospitalización de Pediatría, Unidad Neonatal y UCI Pediátrica entre otros, no se hayan tomado medidas al respecto como realizar de forma inmediata los test al resto de profesionales de dichas unidades así como en otros servicios y unidades del hospital, pero especialmente los antes citados debido a la delicadeza de dichas unidades.
La preguntas que se hacen es ¿Se siguen las instrucciones y protocolos que el propio Ministerio de Sanidad contempla? Y la respuesta es “Está claro que no” ¿Se están dando los datos reales de profesionales contagiados? Y de nuevo la respuesta es un contundente “Por supuesto que no”. Creen que para asegurarse de que estos datos no se disparen y de que el Hospital Universitario de Jaén no se está convirtiendo en un foco de contagio la solución es tan sencilla como hacer los test a la mayoría de profesionales del Hospital.
Si damos bajas “nos quedaríamos sin gente”
Nos comentan que algún trabajador confiesa “en la más estricta intimidad” que desde el equipo directivo se dan instrucciones para que no se realicen test de forma masiva entre los profesionales a pesar de los casos confirmados. El argumento es que “no vamos a enviar ahora a la mitad de la plantilla a casa 15 ó 20 días pues nos quedaríamos sin gente”.
“Amenazas veladas” para quien denuncie la situación
Antes de concluir esta conversación nos anticipan que este lunes 13 de abril, representantes de los trabajadores van a volver a solicitar la prueba para los sanitarios que han estado en contacto directo con quienes hayan confirmado positivo. A pesar de las “amenazas veladas” para quienes denuncien estas situaciones, estas quejas van a transmitirse públicamente y por escrito aunque se excusen bajo el paraguas de las instrucciones dictadas por la Gerencia del Servicio Andaluz de Salud de guardar silencio y no hacer públicas las reclamaciones, unas directrices que obedecen a una interpretación falsa e interesada de instrucciones del Ministerio de Sanidad que nada tienen que ver con la “sugerencia” del SAS.
