El central francés del Atlético de Madrid, Lucas Hernández, está terminando de tramitar la documentación para poder ser seleccionado por España.

El joven Lucas Hernández está a punto de poder convertirse en un futbolista seleccionable por Julen Lopetegui. El objetivo del central de origen francés es intentar entrar en la lista definitiva para el Mundial de Rusia, consiguiendo estar con tan solo 21 años en uno de los equipos favoritos en los pronósticos de fútbol para salir campeón del gran torneo.

El primer paso lo dio el propio Julen, haciéndole saber que estaría muy interesado en poder contar con él como jugador para España, tanto a corto como a largo plazo. La parte que parece que podría decantar el asunto es la posible participación de Lucas en este Mundial, algo que con Francia está casi descartado.

Con la selección 'bleu' ha jugado en las categorías inferiores, pero nunca ha debutado en la absoluta. Este hecho le da al mayor de los Hernández la posibilidad de poder escoger otro combinado nacional si él lo desea y si tiene la nacionalidad, claro está. Precisamente su nacionalidad ha sido el único escollo que ha impedido la convocatoria con la "Roja", de un central que es muy del agrado del seleccionador.

Pero Lucas ya ha hecho todos los trámites necesarios para obtener la nacionalidad española. Algo que conseguirá con total seguridad en muy poco tiempo, por lo que, salvo sorpresa, Lucas podría estar disponible para Lopetegui en la lista de marzo.

Es entonces cuando veremos si de verdad el central tiene opciones de estar en el Mundial de Rusia con España o no. Si Julen le lleva ya a su primera lista, será una declaración de intenciones en toda regla. Y es que, el técnico le ve como un gran recambio para la más que segura marcha de la selección de toda una jerarquía, como Gerard Piqué. Recordemos que el defensa catalán sigue con su idea de retirarse del combinado nacional al acabar el Mundial de Rusia.

Por ello, parece que Lopetegui ha pensado que Lucas podría ser su sustituto. Obviamente no tienen las mismas características, pero la concentración y la polivalencia de Hernández le pone por encima de muchos otros defensas españoles. Es un caso como el de Nacho Fernández, que empezó a acudir con la selección debido a que podía jugar tanto de central como de lateral.

Su debut podría ser en esa concentración de marzo, donde la selección jugará dos amistosos frente a Alemania y Argentina. El segundo encuentro será en el Wanda Metropolitano, la casa futbolística precisamente de Lucas, donde podría debutar y empezar a cumplir su sueño de jugar con España.

Sin duda, esta podría ser una de las grandes gestiones de Julen. Desde su llegada no ha hecho más que ir a visitar futbolistas que juegan en el extranjero e interesarse por aquellos que podrían ser seleccionables para intentar que se decidan a estar con nuestra selección.

Otro de los posibles candidatos a jugar con la "Roja" es el defensa del Athletic de Bilbao, Aymeric Laporte. El jugador tiene la doble nacionalidad francesa y española y, a pesar de preferir jugar con los 'bleus' empieza a pensar que estos nunca le darán una opción, hecho que podría llevar al futbolista a buscarse un sitio en España.

Además de los dos defensas, otro caso parecido es el de un delantero brasileño que está siguiendo los pasos que Diego Costa hizo hace cuatro años, cuando decidió jugar con la "Roja" el Mundial del 2014. William José está buscando la nacionalidad para poder ser seleccionable por Lopetegui, hecho que el propio Julen no descarta. Eso sí, si España está floja de defensas de garantías en los últimos años, no tanto de delanteros, pues con la más que posible vuelta de Costa, el seleccionador tendría a tres grandes puntas en un sistema en el que solo se usa uno. Álvaro Morata es un fijo y Iago Aspas se está ganando a pulso estar en Rusia el próximo verano, por lo que la opción de William José se diluye, al menos a corto plazo.

Un caso especial en esto de las nacionalidades es el de Munir El Haddadi. El hispanomarroquí ya debutó con España en el año 2014, cuando la baja de un jugador de la absoluta hizo que Vicente del Bosque le llamara. Él se encontraba concentrado con la sub-21, principal causa por la que el entonces seleccionador le escogió. Pero desde entonces, solo ha disputado unos minutos con la elástica roja, siendo un futbolista sin posibilidades actuales de volver a la selección.

Por ello, Munir quiere hacer valer su doble nacionalidad para tratar de ganarse un hueco con Marruecos. De conseguirlo, podría acudir a su primer Mundial, enfrentándose a la misma España en la fase de grupos. Pero no será nada fácil, pues la FIFA está en contra de que un jugador que ya escogió en su día pueda cambiar de selección. Habrá que ver si los recursos presentados son válidos y si finalmente Munir puede ir a Rusia con Marruecos.

Y es que, si una cosa queda clara es que en año de Mundial los jugadores realizan movimientos inesperados. Eso sí, tienen que tener cuidado para no realizar el equivocado, sobre todo si no quieren justamente perderse la mayor cita del fútbol.

Es un poco el caso que podría afectar a Diego Costa y a Víctor Machín. Dos fijos en las listas de Lopetegui decidieron fichar en verano por el Atlético de Madrid, a pesar de la sanción FIFA que les iba a impedir jugar hasta el 1 de enero. Vitolo se fue cedido a Las Palmas, donde sus lesiones le han privado de volver con España, mientras que Costa ha estado sin jugar todos estos meses, teniendo un plan específico para volver en su mejor forma.

Sin embargo, parece que el hispanobrasileño tiene más fácil su vuelta a la selección, ya que se ha convertido desde su llegada, en una pieza clave para el sistema de juego atlético. La incógnita es saber si Vitolo se acostumbrará rápido a las exigencias del 'Cholo' Simeone y encontrará su sitio en el equipo titular o sí, por el contrario, se verá relegado al banquillo, donde sería casi imposible que fuera convocado por Lopetegui.

Algo parecido les pasa a todos aquellos futbolistas que deciden dar el paso a un equipo mejor en año con Mundial. En el FC Barcelona, la macha de Neymar Jr. nos deja dos claros ejemplos de ello. Ousmane Dembélé y Philippe Coutinho son dos futbolistas que tenían un sitio asegurado en sus respectivas selecciones. Sobre todo el segundo, que es titular indiscutible en el centro del campo de Brasil.

Pero sus fichajes por el Barça podrían dejarles fuera de la lista, en el caso del primero, y fuera del once titular, en el del segundo, si no consiguen disponer de los minutos necesarios de juego en el Barça. Dembélé ha estado cuatro meses lesionado y poco a poco va entrando en el equipo, lo que pasa es que habrá que ver si el francés se acostumbra rápidamente al sistema o si este se le resiste más de lo esperado, lo cual llevaría al extremo a ser suplente en muchos de los encuentros importantes.

Por su parte, Coutinho no podrá jugar la Champions League y, debido a la lesión con la que aterrizó en Barcelona, apenas podrá disputar la Copa del Rey. Ello le deja únicamente oportunidades de participar en LaLiga Santander, teniendo, a priori, un papel muy importante en la competición. Queda por saber, como con el francés, el tiempo que tardará en acostumbrarse a los automatismos azulgranas.

Varias dudas que recorren las cabezas de los seleccionadores, que se podrán resolver más pronto que tarde y que conoceremos antes del Mundial de Rusia.