Mañana martes, entrará en vigor la Ley que legaliza el acceso a vientres de alquiler para las mujeres portuguesas después de que el decreto que regula su consecuente regulación ha sido publicado en el Diario de la República: "La Ley nº 25/2016, de 22 de agosto, vino regular el acceso a la gestación de sustitución, procediendo a la tercera enmienda a la Ley nº 32/2006, de 26 de julio, que regula las técnicas de Procreación Medicamente Asistida (PMA). La referida ley establece así las condiciones en que es posible recurrir a la gestación de sustitución, concebida para situaciones absolutamente excepcionales y con requisitos de admisibilidad estrictos". 

La ley permite este procedimiento a mujeres que tengan problemas de infertilidad, hayan nacido sin útero o que tengan diferentes problemas que les impidan quedarse embarazadas. Para que sea autorizada la gestación subrogada, la pareja deberá acudir a un centro especializado, ya sea público o privado dónde las mujeres serán sometidas a las diferentes pruebas que prueben la infertilidad de la madre y la situación psicológica de la mujer que proceda a gestar. Además, se deja claro que a excepción de los pagos médicos la mujer gestante no recibirá dinero.

La ley también deja claro que el contacto de la mujer gestante con el bebé deber ser mínimo por los "potenciales riesgos psicológicos y afectivos que esa relación supone, sin perjuicio de las situaciones en las que la gestante de sustitución es un familiar próximo". 

Esta ley encargada en regular el acceso a los vientres de alquiler en el país luso fue aprobada en 2016; sin embargo, el presidente Marcelo Rebelo de Sousa, la vetó alegando vacíos legales. Ante tales hechos, el Parlamento subsanó los errores vistos por el presidente, y de Sousa terminó por firmar. Finalmente, sólo quedaba la creación de un decreto que precisara dicha regulación y fue aprobado el pasado mes de junio.