El CNI no tenía consciencia de los planes de la célula terrorista que perpetró la masacre de Barcelona y el atentado de Cambrils el 17 de agosto de 2017. Así lo acredita La Vanguardia, aportando informes judiciales del juzgado central número 4 de la Audiencia Nacional con autoría de los Mossos d’Esquadra.

Al contrario de las informaciones de Público, que desataron lo que muchos han calificado como teoría de la conspiración, el rotativo catalán desvela que los Mossos fueron quienes reconstruyeron los movimientos de la célula terrorista. Además, las investigaciones se realizaron a posteriori y sustentándose, además de en las pesquisas propias, en las de la Policía Nacional y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI).

Según informa La Vanguardia, fuentes de diversos cuerpos de seguridad afirman que ni el servicio de inteligencia ni la policía tuvieron conocimiento de los movimientos de los yihadistas antes de los atentados. Cabe señalar que Público señalaba directamente al CNI y lo acusaba de conocer los planes del grupo antes del ataque.

La reconstrucción de los hechos se elaboró inmediatamente después de los atentados de Barcelona y Cambrils. Los Mossos se basaron en los móviles incautados a los autores de la matanza tras el ataque. De hecho, uno de estos terminales estaba repleto de conversaciones entre los terroristas, lo que permitiría a los investigadores reconstruir diálogos.

Informe de los Mossos d’Esquadra sobre los atentados de Barcelona y Cambrils. La Vanguardia

Sin embargo, La Vanguardia desvela que los móviles de los terroristas no estuvieron pinchados antes de la matanza, pues se desconocía su existencia antes del fatídico 17 de agosto. Recuperaron, pues, todos los datos de los desplazamientos de los terroristas a través de las antenas móviles, peajes y cámaras de las autopistas, amén de las tarjetas bancarias empleadas para realizar pagos. Incluso contaron con la colaboración de las autoridades francesas mediante lo que se bautizó como un “equipo conjunto de investigación”, según se detalla en los informes de los Mossos.

Reconstrucción ‘a posteriori’

Esta coordinación de diversos cuerpos policiales, con los Mossos d’Esquadra a la cabeza, fue la llave para la reconstrucción del camino que los terroristas siguieron en los meses previos. El CNI también aportó su granito de arena en la investigación, facilitando datos del viaje que Omar Hichamy y Younes Abouyaaqoub realizaron a París. La Vanguardia subraya que el servicio secreto español accedió a esta información tras los ataques terroristas y no antes, como se ha deslizado durante estas semanas.

La Policía Nacional descubrió el desplazamiento a París de los dos terroristas tras los atentados debido al rastro de los movimientos bancarios de la tarjeta que Hichamy y Abouyaaqoub. De hecho, se conoce que la tarjeta pertenece a una cuenta de CaixaBank, a quien se le requirió la información. Fue aquí donde comenzó la reconstrucción del viaje de los yihadistas.

El 30 de agosto de 2017, la Comisaría General de Información de la Policía ya tenía en su poder un informe en el que se recogía la existencia del viaje a París en un Audi A3, al que identifican con su matrícula. “Se tuvo conocimiento del viaje en virtud de lo dispuesto en el auto de la autoridad judicial competente, disponiendo que la compañía VISA facilite los movimientos efectuados a través de la tarjeta bancaria”.

Los dos yihadistas habían pagado por transcurrir por la Autoroute Du Sud, por aparcar en un parking de París, cuyo ticket se halló en un restaurante abandonado en Riudecanyes (Tarragona). “El 13 de agosto ambos sujetos serían localizados regresando a España”, se desliza en el informe de los Mossos.

Ese mismo día, en su viaje de vuelta, los yihadistas dejaron su sello en la autopista catalana. “El Audi A3 con matrícula 9676BHF a las 8:17 franquea el peaje de Martorell y circula por la autopista hasta la salida del peaje de Amposta (Tarragona), siendo las 9:28. En las imágenes (…) de la empresa concesionaria se vislumbra que el vehículo iba ocupado por dos personas, acreditando con alta probabilidad que fueran Hichamy y Abouyaaqoub, ya que el importe del peaje fue abonado con la tarjeta bancaria”.

Los investigadores hallaron el móvil de Mohamed Hichamy, pieza clave en la reconstrucción de los hechos, pues contenía infinidad de audios, tanto en WhatsApp como en Call Recorder (una app para grabar llamadas). En el informe se recoge un resumen de estas conversaciones que el yihadista custodiaba en su terminal.

Página del informe de los Mossos sobre los atentados de Barcelona y Cambrils. La Vanguardia

Según La Vanguardia, los Mossos tardaron un año en realizar este informe. Reconocen que el móvil de Hichamy con las conversaciones guardadas fue capital en la investigación. “Es interesante escuchar el contenido de alguna de estas llamadas, capturado en el teléfono de Mohamed Hichamy. En este indicio se puede escuchar a Mohamed hablando con Omar a las 18:13, momento en que el primero le pregunta dónde está. Le responde que se encuentra en Puigcerdà (Girona)”, relata el informe.

“En otra comunicación de las 19:14 horas, Mohamed llama a Younes y le pregunta si todo está bien, tras lo que se corta la llamada (…)”, se desliza. Los contenidos de las conversaciones entre los yihadistas no los conocían los investigadores antes de los atentados porque tuvieran pinchados sus teléfonos, sino porque los terroristas los custodiaban en los propios terminales.