Isabel II ha enviado una invitación a los duques de Sussex, el príncipe Harry y Meghan Markle, para que asistan a las celebraciones por el próximo aniversario de su coronación, el próximo año, ya que la reina, que tiene 95 años, querría que la familia se mantenga unida antes de que ella muera, según adelanta el diario británico Daily Mail.
"Tanto el duque como la duquesa de Sussex han sido invitados y estoy seguro de que la reina tiene muchas ganas de verlos allí", ha asegurado una fuente al citado medio. "El tema del balcón se decidirá en una fecha mucho más cercana, pero hay un límite para la cantidad de miembros de la familia que pueden estar en él", ha añadido.
La citada fuente se refería a si el príncipe Harry y Meghan Markle posarán junto al resto de los Windsor en el balcón principal del Palacio de Buckingham durante la ceremonia, ya que, a efectos prácticos, el matrimonio ya no forma parte de los actos oficiales desde su marcha a Estados Unidos.
Los duques de Sussex estarán en el desfile oficial
"Yo me decantaría por pensar que los miembros de la realeza que trabajan y contribuyen a la familia estarán más arriba en la lista que los Sussex", dicho la fuente. Según el Daily Mail, los duques de Sussex tienen intención de asistir al próximo Trooping the Color, el desfile oficial que se realiza por el cumpleaños de la reina (en abril), una vez que sus hijos, Archie y Lilibet, puedan viajar con normalidad.
El príncipe Harry estará en el homenaje a Diana
El príncipe Harry se encuentra en Londres desde el viernes pasado y por ahora está confinado los cinco días de cuarentena obligatoria que demanda el gobierno de Reino Unido debido a la pandemia por el coronavirus. El 1 de julio se celebrará un homenaje en memoria de Diana de Gales, que ese mismo día cumpliría 60 años.
El acto será una prueba de fuego para los hijos de Diana dada la tensa relación mantenida en los últimos tiempos tras la salida de los duques de Sussex de Reino Unido y, especialmente tras su entrevista en el popular programa de Oprah Winfrey, en la que dieron detalles de la mala relación con otros miembros de la Familia Real y lanzando acusaciones de racismo.
Según reveló la pareja, el príncipe Harry mantuvo una conversación delicada sobre su hijo con alguien de la familia -del que no quisieron desvelar la identidad- que estaba preocupado porque Archie fuera "demasiado moreno".
Meghan Markle aseguró a Oprah que en la misma conversación se les dijo que no iba a tener título -algo que por ley no le correspondería hasta que el príncipe Carlos asuma el trono- y que tampoco iba a tener protección de palacio.
"Meghan no quería seguir viviendo"
La actriz aseguró que durante su embarazo llegó a tener el pensamiento de no querer vivir. Según confesó, "estaba avergonzada de admitir lo que me pasaba y al mismo tiempo, avergonzada de tener que decírselo a Harry por lo mucho que él había sufrido. Pero sabía que si no lo contaba, lo haría. Simplemente no quería estar viva", explica. Pidió ayuda a Buckingham y les propuso apartarse durante un tiempo, pero se la negaron porque "no sería bueno para la institución", afirmó.
Markle aseguró que altos cargos de Buckingham le pidieron a ella y a su entorno que nunca confirmaran ni desmintieran rumores, sino que se limitaran a decir "sin comentarios". Entonces, ella comprendió que "no solo no me estaban protegiendo, sino que estaban dispuestos a mentir para proteger a otros miembros de la familia. Pero no estaban dispuestos a decir la verdad para protegerme a mí y a mi marido".
Harry dijo que su padre no le cogía el teléfono
El príncipe Harry, por su parte, dijo que su padre dejó de cogerle el teléfono y que le pidió que lo que dejara por escrito lo que tuviera que decirle. El duque de Sussex confirmó que su familia dejó de apoyarlo financieramente en los primeros meses de 2020, cuando decidieron dejar de ser working royals. "Tengo lo que me dejó mi madre, y sin eso, no hubiéramos podido hacer esto". Por su situación financiera se vieron obligados a firmar el contrato con Netflix y Spotify, aseguraron.
El príncipe Guillermo no se sentía "cómodo" con su hermano
El Príncipe Guillermo no se tomó nada bien las declaraciones de su hermano y las acusaciones sobre supuestas actitudes racistas de la familia real británica.
El heredero al trono de Inglaterra, según una fuente citada por Us Weekly, dijo que su hermano "tergiversaba" la realidad y que no se sentiría cómoco manteniendo una conversación con su hermano pequeño.
"Ahora mismo no se siente muy cómodo charlando con su hermano por teléfono porque tiene la sensación de que cualquier futura conversación podría ponerle en riesgo de ser expuesto. Claro que se está pensando que vuelvan a llamarse", dijo esa fuente.
