Tal y como lleva planteando semanas atrás el Ministerio de Sanidad, se ha acordado un plan de actuación conjunto de cara a las próximas festividades del país: Semana Santa y el puente de San José, para evitar la transmisión del coronavirus.

El Consejo Interterritorial de Salud, en sintonía con las comunidades autónomas, ha decretado este miércoles las medidas que estarán en vigor en los próximos días. 

Con el único voto en contra de la Comunidad de Madrid, el Gobierno ha acordado dos cierres perimetrales de las comunidades: uno del 17 al 21 de marzo y otro en Semana Santa, del que quedarán exceptuadas las islas, Canarias y Baleares

De la misma manera, otra de las medidas que se tomarán en común será el toque de queda, establecido desde las 23:00 de la noche a las 06:00h de la madrugada, aunque los territorios podrán flexibilizarlas acorde a sus situaciones.

La reacia postura de Madrid

A pesar de la negativa del ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso, la comunidad, en primera instancia, apuntó que acataría las restricciones, dado que son de “obligado cumplimiento”.

Sin embargo, el consejero de Salud de la región, Enrique Ruiz Escudero, ha apuntado en una rueda de prensa de este miércoles, que la responsabilidad de esta decisión recae en la presidenta regional: “Tomaremos las medidas que creemos oportunas”.