El Tribunal de Trabajo de Australia (Fair Work Commission) ha dado la razón a una empleada del banco Westpac que solicitó seguir trabajando de forma totalmente remota. La decisión, considerada un precedente importante en el debate sobre el teletrabajo, reconoce el derecho de Karlene Chandler a desempeñar sus funciones desde casa de manera permanente.

Chandler, que trabaja a tiempo parcial en el área hipotecaria de Westpac y lleva 23 años en la entidad, había sido autorizada previamente a teletrabajar. Sin embargo, a comienzos de este año la dirección cambió su política y exigió a la plantilla acudir a la oficina al menos dos días por semana.

El argumento de la trabajadora

La empleada recurrió la decisión, alegando que vive fuera de Sídney y que desplazarse hasta una sede corporativa le supondría casi dos horas de viaje. Además, señaló que su rendimiento no se había visto afectado durante el periodo en que trabajó en remoto.

El tribunal dictaminó que no existían motivos razonables para negar su solicitud y subrayó que la empresa no presentó pruebas suficientes que justificaran la obligación de acudir físicamente a la oficina. En la resolución también se recoge que un directivo de Westpac llegó a decirle que “trabajar desde casa no es un sustituto del cuidado infantil”, comentario que la comisión consideró improcedente.

La respuesta de Westpac

Tras conocerse la decisión, un portavoz de Westpac indicó que el banco “está considerando el fallo de la comisión” y recordó que sus políticas de retorno a la oficina buscan “garantizar una colaboración significativa entre los equipos, al tiempo que se mantiene la flexibilidad para trabajar desde casa”.

El sector financiero australiano ha ido reintroduciendo gradualmente la presencialidad tras la pandemia, aunque el ritmo ha sido más lento en la banca minorista que en las entidades de inversión, donde la vuelta a las oficinas es mayoritaria.

Un precedente para el teletrabajo en Australia

La resolución de la Fair Work Commission podría marcar un punto de inflexión en la regulación del trabajo remoto en Australia. El tribunal tiene la potestad de aceptar apelaciones, pero mientras tanto, el fallo refuerza la posición de otros empleados que buscan mantener el teletrabajo como una opción estable y reconocida legalmente.

Reuters no consiguió contactar con Chandler a través de su abogada, pero su caso ya se considera un hito en la evolución del empleo flexible en el país.

* Para la elaboración de este artículo hemos utilizado inteligencia artificial y con supervisión humana.