El Dalái Lama ha pedido perdón este lunes tras la viralización de un vídeo en el que aparece protagonizando un fragmento que ha generado la controversia y ha resultado acusado por fomentar el abuso infantil. En este fragmento, se puede observar al líder religioso besando en la boca a un niño durante un evento organizado por la Fundación M3M que daba el líder tibetano en el templo de Dharamshala. La intervención de uno de los referentes religiosos del mundo se vio interrumpida por un niño que incluso se acercó al asiento del Dalái Lama preguntando: “¿Puedo abrazarte?”.

Lejos de afearle este gesto, fue el referente religioso de 83 años el que le solicitó que se acercase, le invitó al escenario y le pidió un beso en la mejilla mencionando que “primero aquí”. Tras esta escena, el dirigente tibetano señala sus labios diciendo que “entonces creo que finalmente aquí también” y el menor arrima su cabeza con la del mismo, no llegando a hacer contacto en esta zona del rostro.

Sin embargo, el Dalái Lama fuerza este gesto ante la sorpresa del niño que sonríe tras la acción del dirigente, con un público que aplaude el gesto del líder religioso. Pero la escena no acaba aquí. Acto seguido, el mandatario saca su lengua y se acerca a la del menor pidiendo que “y chúpame la lengua” aunque este contacto físico no se llega a realizar tras la retirada del niño, que se había alejado unos segundos después.

El Dalái Lama pide perdón

La Oficina del Dalái Lama ha pedido perdón este lunes tras la controversia del vídeo que fue publicado unos meses después de los hechos sucedidos. “Su Santidad desea disculparse con el niño y su familia, así como con sus muchos amigos en todo el mundo por el daño que sus palabras puedan haber causado”, explica el comunicado publicado en las redes sociales de Tenzin Gyatso. “Su Santidad a veces actúa con las personas de una manera inocente y juguetona, incluso en público y delante de las cámaras. Él lamenta el incidente”, ha defendido la Oficina.  

“El niño pidió un abrazo. Tú pediste que te chupase tu lengua. Nosotros lo hemos escuchado. Esto no aparece en tus ‘disculpas’. Preguntarle al niño que te chupe la lengua no es ‘divertido’ como has escrito. ¿No piensas en cómo se sentirá el pequeño niño sobre esto?”, comenta el activista Rejimon Kuttapan. Cientos de perfiles se han metido a la cuenta del Dalái Lama para comentar su opinión al respecto.

También se suma la del baterista Ferit Odman, así como de activistas y periodistas que han respondido a la publicación del líder religioso tibetano. “Incluso tú me mostraste por qué odio todas las religiones. Una mentalidad enferma que esconden en tu llamada 'santidad'. Basta de todas las instituciones religiosas, sus líderes y sus comportamientos repugnantes y amantes de la pedofilia. Ni siquiera puedo imaginar lo que está pasando detrás de puertas cerradas”, escribe Odman.

Los peligros del Dalái Lama

Las redes sociales también han puesto la alerta sobre el fomento del abuso infantil en las acciones del decimocuarto Dalái Lama. Sin embargo, muchos también recuerdan otros capítulos en el historial de Tenzin Gyatso como la investigación contra el líder religioso y la participación de sus miembros, los "maestros budistas" en violaciones sexuales en 2018. Por ese momento, Gyatso afirmaba en una entrevista con medios de comunicación holandeses que estaba al tanto de los casos de abusos sexuales en centros budistas desde los años 90 y que “no son nuevos para mí, ya sabía todas estas cosas”.

Sacar la lengua es una forma de saludar

Si bien, muchos han defendido las acciones del Dalái Lama por cuestiones culturales. En el Tíbet, sacar la lengua es una forma de saludar, una tradición establecida desde el siglo IX durante el mandato de Lang Darma, conocido por su lengua negra. Esta tradición parte de la creencia de la población tibetana de que el monarca había renacido, por lo que, sacaban la lengua para demostrar que no eran el dirigente con su peculiar color. En la región, esta tradición consta como una forma de respeto.

No obstante, el dirigente religioso no ha estado ausento de polémica. Desde 1959, Gyatso huyó del Tíbet y vive exiliado en India tras una protesta contra el dominio chino en esta región. Hace apenas dos años, el escrutinio público no se despegó del líder religioso ante las palabras de que su futura mujer debería ser “atractiva”. Del mismo modo, la Oficia del Dalái Lama reaccionó y pidió disculpas señalando que el mandatario religioso tiene “un agudo sentido de las contradicciones entre el mundo materialista y globalizado que encuentra en sus viajes y las ideas complejas y más esotéricas sobre la reencarnación que están en el corazón de la tradición budista tibetana”.