La Confederación Intersindical Galega (CIG) ha denunciado la falta de efectivos en el operativo de prevención y defensa contra incendios forestales en pleno período de alto riesgo y ha reclamado la cobertura de todas las plazas del servicio mediante la contratación de personal.

Desde la central han recordado que fue el propio Feijóo el que hizo público el Plan de Prevención y Defensa contra los Incendios Forestales de Galicia (PLADIGA 2019), aprobado por el Consejo de gobierno gallego el pasado 2 de mayo, en el que se detalló la plantilla disponible para la campaña de alto riesgo de incendios que comenzó el 1 de junio.

En el documento se señalaba que serían 7000 efectivos para la lucha contra el fuego, hombres y mujeres que pertenecen a medios propios de la Xunta, Ayuntamientos, Ministerio de Medio Ambiente, así como del ejército y de las fuerzas policiales del Estado.

En lo que se refiere a las brigadas forestales, han asegurado desde el sindicato, en estos momentos “nos encontramos con bomberos y bomberas, al igual que conductores,  de baja laboral o con permisos de maternidad o paternidad, entre otros, que no están siendo sustituidos”. Esta situación está provocando que muchos días “las brigadas de alto riesgo estén inoperativas o con la capacidad del dispositivo reducida, ya que los centros de distrito tienen que reubicar a los bomberos forestales con los conductores de autobomba”, han aseverado.

La situación es similar, según CIG, en los puntos fijos de vigilancia. En el año 2012 “teníamos una red de 106 puntos en toda Galicia, de los que las principales tenían personal suficiente para cubrir las 24 horas en el período de máximo riesgo de incendios”. Sin embargo en la actualidad, en todo el territorio autonómico tan solo existen 44 puntos y no están operativos las 24 horas, ya que según han asegurado “la mayoría de los días están cerrados de 8 a 16 horas”.

No se cubren bajas, vacaciones y permisos

Las mayores carencias de personal para cubrir las 24 horas de vigilancia en máximo riesgo de incendios, los vigilantes “son destinados para realizar labores de emisoristas en los Centros de Coordinación de Distrito”, también por falta de personal para cubrir las 24 horas algunos días.

“El principal desencadenante de esta reducción de personal es que el departamento de Medio Rural no cubre las bajas, vacaciones ni permisos del personal, por lo que nos encontramos brigadas con un solo componente y casetas de vigilancia cerradas”, han criticado.

Asimismo han recordado que el Servicio de Prevención de Incendios Forestales (SPIF) tiene la consideración de servicio público de intervención y asistencia en emergencias de protección civil, de acuerdo con el artículo 11 de la Ley 17/2015, de 9 de julio, del sistema nacional de protección civil. Por lo tanto, han considerado que “no es de recibo que un servicio de emergencias no tenga cubiertos sus turnos de trabajo, en todos los puestos”.

Para terminar, ante esta situación desde CIG han exigido la cobertura total de todas las plazas que dispone este servicio mediante el personal de las listas de contratación y que se cubran las bajas, vacaciones, al igual que los permisos y licencias en este servicio de emergencias, “para alcanzar la mejor protección del territorio como una mayor seguridad y efectividad del propio dispositivo en el período de alto riesgo”.