Más de 100 días llevan cerrados los 38 Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) desde que, al inicio de la epidemia, la cuestionada Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ordenase su cierre. El Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso se excusa diciendo que, en virtud del decreto de Estado de Alarma, la decisión de reabrir estos centros está en manos de la Autoridad Sanitaria.

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Pero teniendo en cuenta que cada uno de estos centros atiende a una media de 55 pacientes al día (que algunos elevan hasta 116 pacientes/día como el SUAP de San Sebastián de los Reyes), son muchas las personas que se están quedando sin atención mientras que la Comunidad de Madrid asume su responsabilidad. “En el periodo en el que han permanecido cerrados estos centros se han podido dejar de atender a 220.000 pacientes”, denuncian desde UGT.

Los enfermeros alertan: "No hay nadie al volante"

 Tanto desde el sindicato como desde las asociaciones de sanitarios aumentan las críticas a la administración de Díaz Ayuso tras unos meses en los que, se supone, todos deberíamos haber aprendido a dar a los servicios sanitarios la importancia que se merecen.

“Sin servicios de urgencias de Atención Primaria en Madrid 100 días después de su cierre. Parece que no hay nadie al volante de la sanidad madrileña”, alerta la Asociación Madrileña de Enfermería Independiente ante la aparición de rebrotes en Madrid.

Los rebrotes llegan a Madrid

Hoy mismo la Consejería de Salud ha informado del primer rebrote en la Comunidad, que afecta a un “entorno laboral” con cinco afectados y que se suma al resto de casos sueltos que también comienzan a repuntar en la región. Contando a sus contactos estrechos, este rebrote mantiene a 18 personas “bajo vigilancia médica”.

Sin embargo, el temor por una segunda oleada se acrecienta y si la Administración madrileña no quiere repetir la experiencia de saturación sanitaria vivida en marzo y abril, debe empezar a dotar de recursos todos los centros y servicios que tiene bajo su responsabilidad a contrarreloj ya que, tal y como alertan los profesionales, la plantilla del SUMMA 112 “es tan escasa que provoca que muchos recursos móviles permanezcan inoperativos o se pongan en funcionamiento sin los profesionales necesarios” y que “multitud de centros son muy antiguos y sus instalaciones impiden la habilitación de zonas limpias de Covid”.