La muerte de un hijo es insuperable. El dolor, cada padre lo sobrelleva cómo puede. La escala de grises del duelo es infinita. Iván, el padre de Vera, la pequeña de cuatro fallecida en un castillo hinchable de la localidad valenciana de Mislata ha encauzado ese dolor en una preciosa despedida realizada a través de un tuit.

Desde su cuenta ha escrito: “Tengo 4 años y me despido del mundo de forma trágica e injusta. Gracias por la fuerza que me habéis dado y el cariño a mis papás y tetes. Y a los 5 amiguitos a los que ayudo a vivir con mis órganos, sed tan felices como he sido yo. Os dejo mi sonrisa para que no desaparezca. VERA”. Su tuit va acompañado de un precioso vídeo de la pequeña cantando.

 

Desde lo más profundo de su corazón, este padre ha explicado que, pese a lo trágico e injusto de la muerte de su hija, la sonrisa de Vera perdurará a través del inmenso acto de generosidad de estos padres que han decidido donar los órganos de Vera para que cinco pequeños y pequeñas puedan vivir.

Desde que Iván Pérez publicó el mensaje en nombre de su hija el tuit no deja de recibir retuits y me gusta. Las muestras de apoyo son infinitas, gente de toda clase social y color político se han volcado con estos padres. Este joven ha demostrado que las redes sociales también son un bálsamo en las situaciones más dolorosas.

Iván con la despedida a su pequeña Vera ha abierto la espita de la razón tantas veces perdida en las redes sociales. La sociedad, con sus emotivas respuestas, ha rendido un homenaje a la pequeña Vera y sus padres por su valentía y generosidad. Sí, Iván, la sonrisa de Vera no se apagará nunca. El amor, a veces, tiene forma de tuit.