Una campaña para concienciar a los sanitarios y trabajadores de hospitales y centros médicos de que se vacunen al igual que ellos vacunan a los pacientes. Esta es la última polémica que rodea al Ministerio de Salud liderado por Dolors Montserrar. ¿Por qué? Por ser machista y anacrónico.

Según ha denunciado el PSOE, la campaña presenta “una imagen anacrónica, machista y sexista de los profesionales sanitarios”, con la figura de una enfermera ataviada con cofia, falda corta y con una jeringuilla en la mano. Por ello, no sólo exigen su inmediata retirada, sino que han soliticado la comparecencia de la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y han presentado varias preguntas.

Esta muestra de machismo se suma a una larga lista de ejempos y por eso “la vacuna que debería ponerse el PP es la vacuna contra el machismo”, ha dicho el secretario general del Grupo Socialista, Miguel Ángel Heredia. Porque “no se puede fomentar desde el Ministerio una imagen absolutamente machista de la profesión sanitaria”, ha lamentado la secretaria adjunta Mª Sol Pérez Domínguez.

Y.. ¿qué opina la ministra? 

Entre las preguntas presentadas, los socialsitas quieren saber qué opinión le merece a la ministra “la imagen simplista, reduccionista, sexista, machista y alejada de la realidad enfermera en España, según ha denunciado el Consejo General de Enfermería”, si “conoce la ministra de Sanidad que las enfermeras en España están realizando intervenciones clínicas avanzadas, gestionando centros sanitarios y liderando equipos multidisciplinares”, y “qué motivos tiene para menospreciar a la profesión de enfermería”.

Asimismo, el Grupo Socialista quiere conocer cómo se ha realizado y gestionado esta campaña: qué departamento la ha autorizado, con qué procedimiento se ha adjudicado, quién ha supervisado su contenido cuál ha sido el coste de la misma y a través de que cauces informativos se difunde.

“Esta es la imagen que tiene el PP de los profesionales sanitarios. La imagen que había en nuestro país hace 60 años. Consideramos que es una ofensa para los profesionales sanitarios, que ha provocado una queja por parte del Colegio General del Enfermería. Y nosotros los que pedimos es la retirada inmediata de esta campaña”. Y por eso esperan que la campaña sea retirada.