Dieciséis diputados de Vox, incluyendo a su presidente, Santiago Abascal, y al portavoz parlamentario, Iván Espinosa de los Monteros, han regresado este lunes a sus despachos del Congreso para trabajar de forma presencial en la sede de la institución, pese a que la actividad parlamentaria se ha reducido a la mínima imprescindible por el coronavirus.

La formación continúa con su frente contra el Gobierno después de que Santiago Abascal no se pusiera al teléfono ante la llamada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la ronda de contactos con los líderes de la oposición para informarles de la prórroga del estado de alarma, una medida contra la que se ha posicionado Vox. El partido subió el tono al difundir una foto manipulada de la Gran Vía de Madrid, con cientos de féretros cubiertos con la bandera de España.

Vox ya había anunciado el pasado viernes que la intención de sus diputados era volver a la Cámara este lunes, siempre que les fuera posible trasladarse en Madrid en su propio vehículo o en medios de transporte que cumplieran los requisitos de seguridad establecidos.

Sin mascarillas

Vox, el partido con más casos de coronavirus reconocidos, ha asegurado que este lunes han vuelto al Congreso 16 diputados y ha distribuido varias imágenes en redes sociales para demostrarlo. En una de esas fotos se ve a Abascal y Espinosa, con guantes, pero sin mascarilla, reunidos en el despacho del primero con la secretaria general del grupo, Macarena Olona, que sí lleva ambas prendas de protección.

En todo caso, desde la formación se ha asegurado que en todo momento los diputados que han vuelto a la Carrera de San Jerónimo están cumpliendo las medidas sanitarias establecidas, incluida la distancia de seguridad.

Denuncian la suspensión del Congreso

Coincidiendo con su vuelta a la Cámara Baja, han vuelto a denunciar que se hayan suspendido las sesiones de control al Gobierno y que las más de mil preguntas y proposiciones no de ley relativas al Covid-19 que han registrado desde el inicio de la crisis estén "aparcadas en un cajón" al haber suspendido el Congreso los plazos de tramitación de las iniciativas parlamentarias.

"Denunciamos que se cerrara el Congreso mientras que el Palacio de la Moncloa y el Ministerio de Sanidad ocultaron a sus trabajadores la existencia de auténticos focos de contagio del coronavirus, poniendo en riesgo, así, la salud de todos ellos", se quejan en una nota de prensa.

La prensa debe poder preguntar a los disputados

Vox ha pedido al Congreso que ponga a disposición de los grupos parlamentarios los medios técnicos necesarios para que los diputados puedan ofrecer ruedas de prensa y ser interrogados por los medios de comunicación, con todas las medidas de seguridad e implicando al mínimo personal imprescindible.

"El Congreso es la casa de todos. Sus puertas no pueden permanecer cerradas. La democracia no puede hibernar. No hay excusas. Si el Gobierno sigue trabajando, ¿por que se ha suspendido la labor de control de los Diputados?", ha escrito en Twitter Macarena Olona, remachando con las etiquetas "#GobiernoCriminal" y #GobiernoDimisión".