Pese a que los 12 escaños de Vox en Andalucía es una realidad y pese a que el partido de ultraderecha tiene la llave para llevar al PP a la Junta de Andalucía, al Partido Popular de Madrid no le interesa saber qué es lo que realmente defienden los de Santiago Abascal.

Así de claro ha sido el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, que frente a los que acusan al PP de poder pactar con un partido que defiende un discurso de ultraderecha, racista, xenófobo y misógino, mantiene que no conoce, ni lo hará en un futuro, su programa. "Ni lo sé, ni me importa, ni me interesa", ha sentenciado.

Para Garrido la palabra "inquietante" define bien "a los extremos" que están en España. "Está por ver lo que pasa con esos partidos, tenemos tiempo para ir hablando con ellos", ha dicho.

Garrido ha sostenido que no le preocupan los resultados de este partido en Andalucía, pero sí los del suyo, "que han sido buenos", así como los que espera que saquen en Madrid y en el resto de comunidades autónomas. Para el presidente, cada uno debe preocuparse de su formación.

Sí que siente que coincide "al cien por cien" con el discurso del presidente del PP, Pablo Casado. En este sentido, ha indicado que en el caso de las autonomías que han trabajado "con lealtad" hacia la Constitución los servicios públicos han mejorado mientras en las que no se ha hecho "han empeorado".

A su parecer, por ejemplo, en Educación, "las asignaturas centrales las debe decidir el Estado". "No puede ser que un niño en Cataluña no estudie lo que es España", ha lanzado.