El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero y la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, han intervenido en el primer acto de los socialistas tras la reciente conformación del Ejecutivo, en el pabellón principal de IFEMA, en Madrid, ante unos 10.000 simpatizantes del partido.

Narbona ha sido la primera en intervenir, agradeciendo a la militancia y a los trabajadores socialistas su esfuerzo tras las complicadas semanas que han tenido que afrontar por las protestas frente a las sedes del partido. "Es el día de agradecer vuestro apoyo en los momentos tan complicados que hemos vivido. Y es también el día de lamentar los ataques sufridos en las sedes socialistas, y mandar un apoyo a todos nuestros trabajadores y trabajadoras, y en particular, en nuestra sede de Ferraz", ha expuesto la presidenta socialista. 

"Hay quienes quieren que desaparezcamos del escenario político mediante mentiras, amenazas y crispación. Pero no lo van a conseguir. De todos modos, que no entremos en su juego no significa que vayamos a poner la otra mejilla, sino que tenemos que plantar resistencia y utilizar las herramientas que tenemos para que sus ataques no queden impunes", ha proseguido, antes de dar paso a Zapatero.

"No conocen de qué pasta está hecho el PSOE"

Zapatero ha hecho lo propio, arrancando su discurso elogiando a los trabajadores del partido y mandándoles su apoyo tras los ataques sufridos en las sedes. "Somos el partido de los 144 años de historia, de las Casas del Pueblo, que sirvieron para que muchos trabajadores aprendieran a leer y a escribir, y que han sido un símbolo de orgullo y de lucha histórica. Nos las tuvieron cerradas durante 40 años y ahora las vandalizan y atacan, pero no conocen de qué fibra está hecho el PSOE", ha arrancado el expresidente del Gobierno.

"El PSOE ha luchado durante toda su historia para que la gente tenga derechos, se pueda manifestar, tanto de derechas como de izquierdas. Por eso, cuando escucho a las derechas hablar de dictadura, me preocupo, porque estamos en un país democrático en el cual la gente puede expresarse libremente tal y como está quedando demostrado al estar manifestándose", ha señalado.

A su vez, Zapatero ha ironizado con que el PP está "teniendo una digestión muy pesada" de que Sánchez sea presidente. "Primero vino el resultado electoral, luego la investidura... Yo les entiendo, tienen una digestión pesada ante todo lo que está ocurriendo. Nosotros sí vamos a darles 100 días. Ellos no dan ni uno, ya están llevando la amnistía a Europa y todo. Yo creo que el día que nació Pedro Sánchez ya le estaban criticando, no se entiende tal fijación y tales críticas cuando todavía no ha empezado la legislatura", ha afeado.

"El otro día Feijóo decía que Sánchez tiene que ser analizado por un experto por si tiene alguna patología. Yo me quedé pensando si se refería a la sonrisa, a que juega al baloncesto... Pero en realidad, la única patología que tiene Sánchez, es que siempre les gana", ha añadido.

El expresidente del Gobierno también se ha pronunciado sobre la ley de amnistía, de la que ha dicho que es "un acto político generoso". "Evidentemente, la ley de amnistía es un acto político en un contexto concreto. Pero tengo que decir que a la democracia le sienta bien la generosidad. Hay que ser valiente para hacer ciertas cosas, yo también tuve que hacerlo. Los cambios que se hacen con valentía, que reforman, que integran, son los que hacen avanzar un país. Y desde aquí quiero reconocer la valentía de Pedro Sánchez con esta ley de amnistía", ha defendido.

Sánchez: "Condenar la matanza de civiles es cuestión de humanidad"

Por su parte, Pedro Sánchez ha comenzado su intervención reivindicando la formación del Ejecutivo, y ha expresado que están "muy contentos". "Santos Cerdán está muy contento, y yo también. Y el motivo no es otro que vamos a tener por delante otros cuatro años de gobierno progresista. Antes, José Luis (Rodríguez Zapatero) reconocía mi figura y me aplaudía, y yo quiero hacer lo propio: su buen hacer también ha sido crucial en todo lo que hemos logrado en este país", ha iniciado.

Sánchez ha continuado hilando con lo que está previsto que sea uno de los principales desafíos de la nueva legislatura: la vivienda. En concreto, Sánchez ha calificado el acceso a este derecho como el "quinto pilar del Estado del bienestar". "Este gobierno pondrá en marcha el quinto pilar del Estado del bienestar, que no es otro que la aplicación de políticas sociales para garantizar y favorecer el acceso a la vivienda y la emancipación de los jóvenes", ha señalado. Justo después, ha recordado que fue Zapatero quien aprobó la Ley del Matrimonio Igualitario, como percha para anunciar que durante la legislatura se promoverá la firma de un pacto de Estado por los derechos LGTBI.

El jefe del Ejecutivo también se ha pronunciado sobre la situación en Israel y Palestina. Esta semana, Sánchez viajó hasta Oriente Medio para reunirse con diferentes líderes y abordar vías para solucionar este conflicto, en el amparo de la presidencia de la Unión Europea. Allí, junto a su homólogo belga y sucesor al frente de este organismo cuando acabe el año, Alexander de Croo, Sánchez definió de "insoportable" el elevado número de civiles palestinos muertos bajo los ataques israelíes, y señaló que era necesario trabajar en el reconocimiento del Estado palestino. Estas críticas palabras fueron tomadas por Israel como "una justificación y apoyo al terrorismo de Hamás", a pesar de llevar, desde que el conflicto entró en una nueva fase el 7 de octubre, reconociendo el derecho de los sionistas a aplicar la legítima defensa en el marco del derecho internacional. 

"Condenar los viles atentados de una banda terrorista como Hamás, y al mismo tiempo condenar la matanza indiscriminada de civiles en Palestina, no es una cuestión de partidos, ni de ideología, ni de estar a favor o en contra de nadie, sino de humanidad. España siempre ha estado del lado de la paz", ha defendido. 

Volviendo al plano nacional, Sánchez ha señalado que "su deber" es representar a toda la ciudadanía, especialmente a aquella que se "horroriza" ante los discursos de Vox: "Nuestro deber no es únicamente representar a las personas socialdemócratas y progresistas, sino también, a aquellas personas que aunque no comulguen del todo con nosotros, se horrorizan ante las barbaridades que dice Vox y ante la derecha que les ha comprado el relato y ha tolerado sus discursos".

"Nosotros fomentamos el bono cultural, ellos censuran la cultura. Nosotros luchamos activamente contra la violencia machista, y ellos la banalizan. Nosotros hemos subido un 47% el salario mínimo en la legislatura y ellos han votado constantemente en contra de cualquier avance social. O se tienen proyectos que defiendan la igualdad y el progreso, o todo lo que hay es ruido e insultos. Pero de momento, tendrán que esperar, porque lo que hay por delante son otros cuatro años de Gobierno progresista en España", ha zanjado.