El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el acto de inauguración de las jornadas confederales de acción sindical de UGT este miércoles, y teniendo como telón de fondo el tenso escenario político de Brasil, ha dado las claves para reconocer a la ultraderecha.

“Hay un método que no falla”, ha empezado señalando el jefe del Ejecutivo central, evidenciando de que “siempre se oponen a cualquier avance social”, enumerando así algunas de las medidas impulsadas durante la legislatura, tales como el Ingreso Mínimo Vital (IMV), la subida a las pensiones o las políticas de igualdad, entre otras.

“Cuando no consigue bloquear esos avances por vías democráticas, porque la ciudadanía les da la espalda, lo que hacen es oponerse a la democracia y recurrir al asalto de las instituciones democráticas”, ha apuntado.

De este modo, Sánchez ha puesto de relieve lo sucedido estos días en Brasil, donde los seguidores del expresidente Jair Bolsonaro repitieron la imagen del Capitolio de Estados Unidos tras la toma de posesión de Lula da Silva como nuevo jefe del Ejecutivo central. “Tacharon de ilegítimo al Gobierno democrático elegido por los brasileños en este caso, se continúa con una escalada de violencia verbal, de insulto, de crispación y de intento de polarización y se acaba en el asalto a las instituciones democráticas", remarcó.

2023, año “crucial” en la política española

Sánchez ha subrayado que en un año "tan electoral" que da comienzo, el Gobierno de coalición seguirá la misma línea de los "últimos tres años" y va a seguir "dignificando" las pensiones, aumentando el salario mínimo y "seguir protegiendo a la gente de a pie”.

A su juicio este es un año "crucial" para España en el que los ciudadanos van a tener que elegir entre dos alterativas. Por un lado, la de su Gobierno que, tal y como ha ensalzado, protege el empleo y las rentas de las familias y pone "todas las herramientas del Estado" para este fin y por el otro, un modelo "anclado en defender el interés de algunos poderosos", en referencia al PP, que pretende utilizar las mismas recetas que durante la anterior crisis financiera.

Echando la vista atrás una década, allá por 2013, el presidente ha comparado la situación económica de entonces con la de ahora, cuando en aquella época había casi seis millones de parados, se aportaba uno de cada tres desempleados de la Unión Europea, se había producido un desplome en el consumo y en el sector de la cultura "por el aumento del IVA", el cierre de urgencias en el medio rural y en algunas comunidades autónomas "conservadoras" se iniciaba el copago farmacéutico.

"En aquel enero de 2013, la tasa de paro supero el 26% y el 57% de jóvenes menores de 25 años estaba desempleado. Es ahí de dónde venimos", ha subrayado con relación a la precariedad de los jóvenes trabajadores.

Sobre pensiones ha puesto en valor la subida del 8,5% aprobada para este año, que sitúa la pensión media en "1259 euros", según ha señalado" y ha recriminado al PP que con su sistema de revalorización la cantidad promedio que reciben los jubilados sería de tan solo "1.101 euros al mes".