El Ejecutivo de Castilla y León del PP y Vox ya ha sentado cátedra. Tras varios tiras y aflojas, los populares de Carlos Mazón han alcanzado un preacuerdo para gobernar en la Comunitat Valenciana con los ultras este martes. Un pacto de coalición que, sin embargo, no contará a la cabeza con Carlos Flores, candidato ultraderechista a la Presidencia de la Generalitat condenado por violencia machista y vetado por Génova. Los de Santiago Abascal finalmente ceden así a las presiones de la cúpula popular nacional y han decidido sacrificar este nombre para lograr asientos en la Administración. Aunque se desconocen los términos completos por ahora, ya Vox ha deslizado que el reparto será "proporcional" a los resultados y que ellos tendrán "peso" en el organigrama. Con todo, la formación no ha desechado la figura de Flores, que se convierte en su número uno al Congreso por Valencia de cara a las elecciones generales del 23 de julio. De ser así, y a expensas de lo que ocurra en Extremadura, este será el segundo Gobierno de alianza entre la derecha y la extrema derecha en nuestro país.

Acuerdo PP-Vox en la Comunidad Valenciana

Giro inesperado en las negociaciones, aunque no sorprendente. Este martes los equipos encargados de alcanzar un pacto entre el Partido Popular y Vox tenían previsto celebrar una reunión a primera hora de la mañana para ultimar la ronda de contactos con los distintos partidos para la formación de Gobierno. Un encuentro que finalmente ha sido fructífero. Así, los populares y los ultras han alcanzado un preacuerdo para conformar un ejecutivo de coalición en la región, tal y como ha anunciado el candidato de Vox a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Flores, durante una comparecencia ante los medios tras la mesa redonda con Carlos Mazón. El diálogo final ha durado cerca de tres horas y en él también se ha decidido el reparto de la Mesa de Les Corts.

Así, hasta ahora se conoce que Vox va a presidir este órgano institucional mientras el PP tendrá una vicepresidencia y una secretaría. De hecho, no solo se ha llegado a una alianza sino que se ha abierto la puerta de par en par a una coalición de pleno derecho. El candidato ultra, condenado por violencia machista, ha emplazado a futuras reuniones para discernir las Consellerias que ostentará cada partido, aunque ha señalado que será un número "proporcional" a los resultados bajo la promesa de que las suyas tendrán "peso". Este pacto supone un paso adelante de los populares para abrir la veda de dialogar con los ultraderechistas de cara a establecer nuevas administraciones a lo largo y ancho del territorio español. Actualmente hay 135 municipios en los que Vox es la llave para el PP.

Flores, 'número uno' de Vox al Congreso

En esta alianza valenciana, que se sumaría así a la estela de Castilla y León con Alfonso Fernández Mañueco y Juan García-Gallardo, hay un paso atrás de los ultras. Y es que Flores, candidato para la Generalitat, finalmente no va a estar en la cúpula del ejecutivo, presumiblemente liderado por el propio Mazón, y será el cabeza de lista de la formación al Congreso por la circunscripción de Valencia para los comicios del 23 de julio. De esta forma, los de Abascal ceden ante los vetos de Génova contra este nombre, que ya fue su candidato por la Comunidad Valenciana en las autonómicas del 28 de mayo y este mismo lunes ha sido señalado por la cúpula popular para llegar a acuerdos en la comunidad. "Yo no voy a dar un paso al lado, voy a dar un paso adelante", ha dicho Flores.

El portavoz del comité de campaña del PP y vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta, Borja Sémper, sostuvo de forma pública desde la sede popular que la condena por maltrato del candidato contra su expareja era una "línea roja" para este partido, a pesar de que Alberto Núñez Feijóo ha dado carta blanca total a sus dirigentes regionales para aliarse con los de extrema derecha. Horas después los populares valencianos deslizaron la posibilidad de que este hecho no supusiera un escollo fundamental que hiciera caer la opción de dirigir la autonomía. Ahora queda por conocer todos los asientos. Por ahora Vox ostentará la presidencia de la Mesa de las Cortes valencianas y varias consejerías, mientras ambos partidos continúan negociando para dirimir quién se queda con la vicepresidencia.

Vox logra tres concejalías en Elche

Entre tanto, el Partido Popular y Vox han firmado este martes en Elche otro acuerdo de coalición con el que esperan gobernar, al menos, durante las dos próximas legislaturas. Este se ha convertido de esta manera en el primer ayuntamiento en el que se cierra un pacto de estas características entre ambas formaciones pese a que en las pasadas elecciones municipales la lista más votada fue la del Partido Socialista, que no logró sumar con Compromís. Los naranjas perdieron un concejal. Así, la nueva coalición de gobierno que ha resultado de estas conversaciones se hará efectiva en la toma de posesión este próximo sábado, cuando finaliza el plazo y fecha en la que se investirá como alcalde al popular Pablo Ruz.

El dirigente ha señalado que se creará la concejalía de la Familia, que estará dirigida por la concejala ultraderechista, Aurora Rodil. Aun así, los populares también quieren controlar la acción de los de extrema derecha en el ejecutivo local, por lo que las concejalías operarán de una forma común compartiendo acciones, ya que el Partido Popular llevará el área concreta de la Mujer. Será Vox quien llevará también la concejalía de Promoción del Empleo y la que coordinará las pedanías. Así, la formación de Abascal se ha hecho con tres concejalías de especial importancia: Familia, Promoción del Empleo y Coordinación de las pedanías. Estos convenios se han ganado las críticas del PSOE y Moncloa, que han tildado esta situación de "vergonzosa" y han recordado que "se han sentado a negociar con un señor condenado por violencia machista".