Los principales responsables de la trama Gürtel han intentado invalidar las grabaciones que entregó el exconcejal del PP en Majadahonda, José Luis Peñas, a la Policía y que destaparon esta trama de corrupción. Peñas ahora comparte banquillo con Francisco Correa, Pablo Crespo, Álvaro Pérez el Bigotes, Guillermo Ortega -su alcalde en el Ayuntamiento de Majadahonda-, Alberto Lopez Viejo, Benjamín Martín Vasco o Jacobo Gordon, entre otros. Coincidiendo con el inicio del juicio desplegaron todas su artillería para conseguir, in extremis, en última instancia la nulidad de procedimiento. 

Sin embargo la estrategia no coló y la fiscal Concepción Sabadell dejó muy clara la postura: las grabaciones, "ni son nulas ni están manipuladas". Asimismo, aclaró que tampoco vulneraban "el derecho a la intimidad de los acusados" ni de "ningún derecho fundamental". 

Agotada esta vía, algunos abogados de la defensa han intentado sobornar al denunciante de la Gürtel para que cambiara su versión. Durante los descansos del juicio, según ha denunciado a ELPLURAL.COM, ha recibido al menos la visita de dos letrados Gürtel que le han ofrecido dinero a cambio de modificar su testimonio. "Han intentado comprarme con dinero, no me han dado una cantidad exacta, pero a buen entendedor pocas palabras bastan", asegura.  ¿Qué buscaban en concreto? "Querían que dijera que Alfredo Pérez Rubalcaba estaba detrás de las grabaciones, que él lo organizó todo".

Crespo apuntó contra Rubalcaba en su declaración

El que fuera secretario de Organización del PP gallego y lugarteniente de Correa, Pablo Crespo, acusó a Rubalcaba durante su declaración en el juicio el pasado 24 de octubre. Haciéndose eco de la inicial defensa del PP, denunciando una trama contra el PP, Cespo dijo: "La información que yo tenía es que desde el despacho de Alfredo Pérez Rubalcaba -por entonces ministro de Interior- y luego de su sucesor Antonio Camacho se había organizado con policías amigos una operación contra el PP, y que en ese asunto estaba Correa por su relación con el yerno del señor Aznar [Alejandro Agag]". Asimismo, señaló que dicha información la recibió “de una persona que no viene al caso” en “noviembre del año 2008”.

Peñas siempre ha sostenido que decidió ponerse a grabar las conversaciones al descubrir los chanchullos de Correa con algunos dirigentes del PP. En concreto fue un comentario que oyó por casualidad a Benjamín Martín Vasco, exdiputado del PP en la Comunidad de Madrid, exigiéndole una mordida por un negocio en Arganda. Fue en ese momento cuando decidió grabar de forma secreta a Correa para denunciarlo ante la Justicia. Lo hizo durante dos años y las grabaciones obtenidas durante ese tiempo destaparon el mayor caso de corrupción política mayor de la democracia.

La Fiscalía pide para él 6 años y cinco meses de cárcel por los presuntos delitos de malversación, prevaricación, cohecho y falsedad documental. "Yo no pedí nunca un trato de favor, fui a la Policía con una denuncia y con dos años de pruebas", explicó recientemente a ELPLURAL.COMargumenta. "Decidí el camino más peligroso para mí y para mi familia, y el que sabía que la mayor parte de la gente no lo iba a entender", comentó.

Durante este tiempo ha recibido todo tipo de amenazas e incluso agresiones. La peor, cuando alguien provocó un accidente de coche de su mujer, sacándola de la carretera. "Por la noche llamaron diciendo que la próxima vez se caería mi mujer y mis hijos de un sitio más alto", nos relató hace apenas un mes, en una entrevista con motivo del inicio del juicio. Aguantó entonces las presiones, comenta y seguirá haciéndolo ahora. "Han dado con hueso si piensan que voy a echarme atrás. Lo hice porque consideré que era mi deber ciudadano y llegaré hasta el final", concluye.