El 26J se cerró un ciclo en Podemos. Así lo ha afirmado Pablo Iglesias, que mantiene que ha concluido una intensa etapa y que, con ello, termina la "hipótesis" del "asalto a los cielos". La campaña electoral ha finalizado y ahora tendrán que mirar al frente y afrontar los “nuevos retos”.

Pablo Iglesias mantiene que ahora comprende que tienen que cambiar las cosas “desde las instituciones” y que el partido debe “normalizarse”. Ahora, la situación de Podemos es diferente, forman parte del parlamento y “podemos consolidarnos o que no funcionemos como ejército regular”. En relación a este asunto, afirma que “podemos ganar las elecciones o podríamos darnos una hostia de proporciones bíblicas”.

Ante la incertidumbre del nuevo escenario que tendrá que afrontar la formación morada, el líder de Podemos asegura que “eso me impresiona, incluso me acojona”, ya que es uno de los “retos más complicados” hasta la fecha.

“No hay garantía de que nos vaya a ir bien, sabemos si nos va a ir bien” ha recalcado el líder de la formación, que ha asumido un papel un tanto pesimista. Y es que, ha dejado entrever un cambio de estrategia: “Ya no somos outsiders”. También ha reconocido que "se acabó la hipótesis Podemos, el estilo Podemos, se acabó el blitz (guerra relámpago, en alemán), se acabó la posibilidad de impugnaciones y se acabó la gramática que a nosotros nos permitía jugar con cierta soltura".

Un discurso con tintes pesimistas que ha concluido asegurando que Podemos está preparado para hacer frente a los nuevos retos, aunque “no va a ser nada sencillo”.