Fotografía cedida por Estudios Revolución del presidente de Cuba, Raúl Castro (i), conversando con su homólogo de EE.UU., Barack Obama (d), este 11 de abril de 2015, durante una histórica reunión, en la VII Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de las Américas que se celebrará en la Ciudad de Panamá. EFE



Estados Unidos y Cuba afianzaron  su deshielo con la histórica reunión de los presidentes Barack Obama y Raúl Castro en la VII Cumbre de las Américas, el escenario donde se pasó página al último conflicto de la Guerra Fría en el continente. En Estados Unidos, sin embargo, los republicanos no han esperado para hacer públicas sus críticas. El exgobernador de Florida y posible candidato a la Presidencia en 2006, el republicano Jeb Bush, ha criticado el encuentro entre Obama y Castro.

Bush reprocha a Obama que no se reuniera con Netanyahu
Jeb Bush reprochó a Obama que se reúna con Castro, pero se negara a hacerlo con (Benjamín) Netanyahu. "¿Por qué legitimar a un cruel dictador de un régimen represivo?", escribió Bush en su cuenta de Twitter. El exgobernador se refirió así a la negativa de Obama de reunirse con el primer ministro israelí a principios del mes pasado, cuando por invitación de los republicanos del Congreso dio un discurso a pocas semanas para las elecciones en Israel.

Obama ve factible avanzar en las relaciones
El primer encuentro de dos gobernantes de Cuba y EE.UU. en más de cinco décadas duró una hora y veinte minutos, en los que Obama y Castro hablaron "honestamente" y con sinceridad sobre el restablecimiento de relaciones bilaterales, con el objetivo de avanzar en el proceso pero sin obviar las "muchas diferencias" que existen entre ambos países.

"Ahora estamos en condiciones de avanzar en el camino hacia el futuro", afirmó Obama, quien ve factible que, con el tiempo, su país y la isla puedan pasar página a su "complicada" historia y "desarrollar una nueva relación".

"Cuba no es una amenaza"
Cuba "no es una amenaza para Estados Unidos" ni el objetivo es un "cambio de régimen", destacó un Obama "cautelosamente optimista" con el progreso de las negociaciones para la normalización bilateral.

Y en la otra silla, Raúl Castro abordó su primer cara a cara con Obama dispuesto a hablar "de todo" y con "mucho respeto", según dijo antes de la reunión que se celebró tras la primera parte de la sesión plenaria de la Cumbre de las Américas.

Castro califica a Obama de "honesto"
Un foro donde Castro, en el primer discurso de un presidente cubano en el cónclave continental, no dudó en calificar de "honesto" al actual presidente de EE.UU. y hasta lo eximió de la responsabilidad de la política hacia Cuba desarrollada por los diez gobernantes que han precedido a Obama desde que triunfó en 1959 la Revolución castrista.

"Nuestro reconocimiento por su valiente decisión de involucrarse en un debate con el Congreso de su país para ponerle fin", señaló el presidente cubano