El Gobierno y la Generalitat han puesto en una tesitura delicada a las Fuerzas de la Seguridad del Estado. Los guardias civiles han llegado a denunciar que les usan como “carne de cañón” y no es diferente la situación que viven los Mossos d’Esquadra, a los que el Govern dejará a los pies de los caballos el 1-O. Los agentes de este Cuerpo se debaten entre actuar para impedir la votación, como les exige la ley, o amparar el referéndum, como pretende el Gover. Ante esta disyuntiva, algunos se están planteando no acudir a trabajar ese día amparándose en bajas médicas, según ha podido saber ELPLURAL.COM.

“Muchos Mossos están muy nerviosos. No saben qué pasará. Hay agentes no van a ir a trabajar por baja médica, no para favorecer a un lado u otro, sino simplemente porque no quieren incumplir la ley”, dicen fuentes solventes a ELPLURAL.COM.

Los Mossos están viviendo momentos de gran tensión y temen que “llegado el momento”, el próximo domingo, cuando se celebrará el referéndum, “tengan que hacer caso a la jerarquía policial y desobedecer la ley”, añaden las mismas fuentes.

Fuentes autorizadas de los Mossos d'Esquadra, consultadas por este diario, han dicho que "no tenemos constancia" de ello. "Primera noticia", han insistido.

El Govern avisó de que decidirá "la manera de actuar"
El consejero de Interior, Joaquim Forn, advirtió este jueves que será el Govern el que decida “de qué manera se actuará” el domingo y dio pistas de por dónde irán los tiros cuando afirmó que los Mossos priorizarán “la salvaguarda de la convivencia" por encima de impedir la celebración del referéndum.

Del otro lado, el secretario de Estado de Interior,  José Antonio Nieto, avisó de que los Cuerpos de Seguridad del Estado tienen el objetivo de impedir un acto declarado ilegal por el Tribunal Constitucional.

Policías nacionales pidieron a los Mossos cumplir la ley
Este jueves, la mayoría de los sindicatos policiales dieron una rueda de prensa conjunta, en la que recordaron a los Mossos d’Esquadra que “la profesión policial es singular porque comienza con la jura o promesa de guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado”.

Los sindicatos con representación en el Consejo de la Policía Nacional, SUP, CEP, UFP, SPP y ASP,  dijeron confiar en que “los Mossos no van a apartarse estos días ni un milímetro de la legalidad y de las órdenes judiciales que reciban”. 

“Estamos aquí como instrumento de jueces y fiscales para restaurar la legalidad quebrada, como garantía de que el sistema legal que ordena la convivencia de todos los españoles no se ve desbordado por iniciativas unilaterales y por la búsqueda de atajos al margen de la legalidad o por estrategias basadas en la imposición y el acoso”, defendieron los policías nacionales en un comunicado difundido en su rueda de prensa.

El Mayor se enfrenta a un delito de desobediencia
En una resolución judicial, del miércoles pasado, la magistrada  del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña Mercedes Armas instó a los Mossos, como a la Policía Nacional y la Guardia Civil, a "impedir" el uso de espacios públicos para el referéndum. Si el Mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, se niega a ejecutar la sentencia, podrá ser investigado por desobediencia, castigado con penas de multa y exponerse a la inhabilitación de hasta dos años para el ejercicio de cargo público.