Lorena Ruiz-Huerta, la exportavoz de Podemos en Madrid, ha decidido darle un giro a su vida profesional después de que hace un mes dejase su escaño y el partido por discrepancias con Podemos. Tal y como informa eldiario.es, ha retomado su trabajo como abogada en la organización ecologista Greenpeace, donde acaban de ficharla como coordinadora de análisis jurídico, dentro del área de incidencia política.

Greenpeace ha explicado que se trata de un nuevo cargo, remunerado con 34.500 euros anuales, al que Ruiz-Huerta accedió, cuando aún era diputada de Podemos, tras “un proceso de selección abierto donde competía con una decena de candidatos”. Siendo la cara visible del grupo parlamentario reunía mas del doble de ese salario anual, aunque el partido le restaba un porcentaje dentro de su política para limitar los sueldos de cargos públicos a tres veces el salario mínimo interprofesional.

“El puesto se creó porque necesitábamos reforzar la parte jurídica del área de incidencia política, que creamos hace tres años. La función es, básicamente, analizar toda la legislación que va saliendo que pueda afectar a la defensa del medio ambiente”, según sostiene Julián Carranza, director de Organización de Greenpeace España. Al mismo tiempo, Julián Carranza ha subrayado que Ruiz-Huerta “ya no tiene ninguna vinculación con ningún partido político” y ha asegurado que su perfil encajó “como la pieza de puzzle” con lo que estaban buscando.