La Reina Sofía reaparecerá el 21 de septiembre en Málaga, en un congreso sobre alzheimer, después de su largo período de vacaciones en Palma de Mallorca, donde se le ha visto sola pasear por el centro de la ciudad, acompañada únicamente por sus guardaespaldas. "Ataviada con alpargatas, portaba un enorme paraguas para protegerse del sirimiri que caía. Quien no conociese a la Soberana, la habría tomado por una jubilada solitaria", describe Consuelo Font en La Otra Crónica de El Mundo.
La dolce vita del Rey Juan Carlos
La vida discreta y tranquila de la Reina madre contrasta con la del Rey Juan Carlos, quien desde que abdicó se ha dedicado a vivir la dolce vita. En mayo, cuando se cumplía el 53 aniversario de su boda, el Monarca visitaba, en viaje privado, República Dominicana para reunirse con amigos. Don Juan Carlos no ha parado de viajar desde la abdicación: desde Oriente Medio al Caribe, pasando por Beverly Hills.
La Reina, vida tranquila con sus nietos
La Reina Sofía se instaló en Marivent el pasado 26 de junio, junto a su hermana Irene, su prima Tatiana Radziwill y su marido, ha salido en contadas veces. El 18 de julio viajó a Belgado al 70 cumpleaños de su Alejandro de Yugoslavia. Se ha dedicado el resto del verano a estar con sus ocho nietos. El primer fin de semana de agosto consiguió reunirlos a todos y organizó para ellos una merienda en Marivent. Luego a compartido con ellos por separado, primero los cuatro hijos de Urdangarin y la Infanta Cristina. Luego, las princesas Leonor y Sofía, antes de que se fueran de vacaciones con sus padres. Y, por último, Froilán y Victoria Federica.
Sola, en Marivent
Una vez sola, la Reina ha pasado gran parte del día en la terraza ubicada en la planta superior del palacio, desde donde se puede contemplar el Mediterráneo y donde desayuna, come y cena.
El acto del próximo día 21 en Málaga será su vuelta tras las vacaciones, aunque el 19 de agosto presidió en Palma el último de los 38 actos oficiales en los que ha estado desde la abdicación del Rey Juan Carlos.
