El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, no cesa en su ronda de contactos mundiales mientras que las tropas rusas continúan sembrando el terror en las principales ciudades del país, dejando escenarios totalmente arrasados como Mariúpol. Con este contexto detrás, el discurso del mandatario ucraniano se recrudece por días y, este martes ante el Parlamento italiano, ha lanzado una dura advertencia: "Ucrania es una puerta a Europa para el Ejército ruso y quieren romperla". 

Zelenski ha comenzado su comparecencia pidiendo a Italia que no se convierta en "un resort para asesinos rusos" y ha solicitado su ayuda para "establecer la paz" en Ucrania. "Conocéis bien a nuestra gente, que nunca ha querido luchar, que es tan europea como tú. Sabéis quién ha llevado la guerra a Ucrania. Sabéis quienes ordenan matar, casi todos, utilizan Italia como lugar para descansar", ha aseverado. 

Así, ha instado a "bloquear las cuentas y bienes" de los rusos en el país, además de restringir su influencia, una medida que ya ha sido tomada en otros países como Países Bajos. "Ucrania es una puerta a Europa para el Ejército ruso y quieren romperla. Pero la barbaridad no debe pasar. Los ucranianos fueron los primeros en ir en vuestra ayuda cuando comenzó la pandemia de coronavirus. Los italianos fueron de los primeros en ir en nuestra ayuda también", ha recordado para evidenciar los lazos de su país con los Estados europeos.

"Nuestro pueblo se ha convertido en el Ejército. Las tropas rusas hacen lo que hacen los nazis. Esta es una guerra que Rusia ha estado preparando durante mucho tiempo. Que una sola persona lleva mucho preparando. Durante décadas. Ganando dinero con exportaciones de gas y petróleo y dirigiendo esos fondos para preparar la guerra. Y no solo contra Ucrania. Su objetivo final es Europa", ha alertado ante los parlamentarios italianos y el resto del mundo pendiente de sus palabras. 

Horizonte incierto de conversaciones

En paralelo a las alianzas diplomáticas que está forjando Ucrania en el territorio europeo, continúan las negociaciones con Rusia por intentar hacer efectivo un alto el fuego sin claroscuros y corredores humanitarios seguros en las principales ciudades ucranianas. Con este contexto como telón de fondo, el propio Zelenski afirmó "estar abierto" a mantener una conversación con Putin: "Ha llegado el momento de reunirse y hablar". 

No obstante, desde Moscú no adoptan la misma postura y se aferran a que no se han dado aún los avances suficientes para que se celebre dicho encuentro. "Para hablar de una reunión entre los presidentes, primero hay que hacer los deberes y lograr un acuerdo sobre los resultados de las negociaciones (...) El grado de progreso en las negociaciones probablemente no es el que nos gustaría y el que las dinámicas de los desarrollos de los acontecimientos requiere para el lado ucraniano. Si ellos (los presidentes) no tiene nada que abordar, no hay un acuerdo que pueda lograrse"", ha señalado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.