Ya van tres dimisiones en el Gabinete británico después de que el Gobierno de Theresa May aprobase el acuerdo para salir de la Unión Europea. El ministro para el Brexit, Dominic Raab, la ministra de Trabajo y Pensiones de Reino Unido, Esther McVey y el ministro para Irlanda del Norte, Shailesh Vara.
Raab era conocido por su papel de euroescéptico y por su defensa del Brexit y tenía el encargo de conseguir que la parte más conservadora de los tories, tras la marcha de su predecesor, David Davis. Justo después del refuerzo que había recibido May por parte de su gabinete, la dimisión de Raab supone otro duro golpe a su liderazgo y se produce a las puertas del principal reto de May: comparecer en el Parlamento para explicar el acuerdo y recibir las críticas de propios y extraños. La dimisión de Raab ya ha tenido una primera consecuencia: la económica. Justo después de conocerse su marcha la libra esterlina se ha desplomado en los mercados, cuando había repuntado con el acuerdo del Brexit.
Esther McVey considera que May "no respeta el resultado del referéndum" de junio de 2016. McVey, que ha publicado en Twitter su carta de dimisión apenas una hora después de Dominic Raab, ha defendido que está en juego "el futuro del país y la integridad de la democracia" británica. La ministra saliente ha recordado a May que había prometido que Reino Unido "recuperaría el control del dinero, de las fronteras y de las leyes" y que desarrollaría una política comercial "independiente" a la de la UE. Sin embargo, "este acuerdo no cumple" los objetivos marcados, a su juicio.
Shailesh Vara, por su parte, justifica su renuncia en que el acuerdo, a su juicio, "nos tendrá bloqueados en un periodo de tiempo indefinido, sobre el que no tendremos nada que decir y que, en la práctica, seguirá haciéndonos aplicar leyes y normas de la Unión Europea".
