El gobierno federal de Australia ha votado a favor de un alto al fuego en Gaza.  El hecho ha provocado el rechazo de la comunidad israelita y llenado de satisfacción y alegría de los palestinos que viven en el país. Una decisión mantenida en secreto por los responsables de Asuntos Exteriores.

El país propuso una resolución del conflicto demandando de inmediato el libre paso de ayudas humanitarias y el alto al fuego en Gaza. En la misma línea, la resolución subrayaba la situación catastrófica de la población civil palestina que vive en la zona del conflicto. Además, mencionaba la libertad de todos los rehenes.

Una decisión gestada en secreto

Algo reseñable es que la decisión se tomó en secreto. Miembros del Gabinete ministerial mostraron su desacuerdo porque algunos compañeros simpatizaban con la causa de Israel, aunque otros otros tenían presente el gran número de palestinos que habían muerto en los últimos tres meses. Mark Dreyfus, ministro de Interior, y el parlamentario laborista Josh Burns, son judíos, mientras que los ministros Ed Husic y Anne Aly, son musulmanes.

Los partidos de la coalición están más unidos y prefieren aliarse de manera unánime con el Estado de Israel. Por último, en lo que se refiere al partido de los Verdes, de una larga tradición de tendencia progresista, se mantiene proclive en defender los derechos de los palestinos.

Presión política y ciudadana en favor de Palestina

La ministra de Asuntos exteriores australiana, Penny Wong, durante su viaje en el mes de octubre a Oriente Medio ya hizo hincapié en una negociación entre los dos bandos con el objetivo de poner fin a los bombardeos y permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza. Una decisión que no fue bien acogida por el gobierno israelí.

En las últimas semanas, diferentes movimientos han exigido a miembros laboristas que el gobierno federal se identifique con la causa palestina. Entretanto, las bases progresistas y decenas de miles de australianos han estado reclamando durante casi tres meses en calles, plazas y avenidas de Sídney, Melbourne y otras demarcaciones lo mismo.

Con la ONU

Por otro lado, antes de comenzar la votación en el foro de Naciones Unidas, miembros del Ejecutivo se pusieron en contacto con los gobiernos de Israel y Estados Unidos adelantando su posición a favor de terminar de inmediato con la guerra en la Franja.

Cabe recordar que Australia decidió abstenerse en la última reunión de comienzos de octubre, debido a que la resolución no reconocía al grupo militante Hamás como responsable del ataque contra Israel.

La comunidad hebrea, sorprendida

El embajador israelita, destacado en la legación diplomática de Canberra, Amir Maimon, dijo a través de redes sociales que "resultaba extraño entender cómo Australia subraya por un lado que Israel tiene el derecho de defender a sus habitantes de agresiones terroristas y, por otro, apoye el alto al fuego que podría ‘justificar’ que Hamas continuara atacando a Israel".

En la misma línea, miembros de la comunidad judía y grupos de presión en Australia también recibieron comunicados sobre las intenciones que tenía el gobierno australiano en el foro de la ONU. En este contexto, acusaron al primer ministro y su Gabinete de crear confusión.

Mientras tanto, en el ámbito político del parlamento australiano, Peter Dutton, líder de los partidos de la coalición conservadora, manifestó que Albanese apoyó la resolución en pro de los palestinos para tratar de buscar respaldo entre los ciudadanos que votan al partido de los Verdes, que apoyaron abiertamente la causa palestina.

Resolución de la ONU

31 naciones votaron por primera vez a favor de interrumpir el alto el fuego.

Gilad Erda, embajador de Israel, urgió a los miembros participantes en la sesión de Naciones Unidas a posicionarse en contra de la resolución. A continuación, señaló que "no entendía como los delegados votaron a favor sin condenar las acciones de Hamás".

Por su parte, Izatt Salah, máximo representante de la comunidad palestina en Australia declaró que "la resolución era bienvenida y muy importante para la comunidad palestina que vive en Gaza".

Jurídicamente, la resolución no tiene carácter legal. Sin embargo, serviría para que disminuya el potencial de las fuerzas militares israelíes en la zona en la Franja de Gaza. Una zona del Oriente Medio donde el número de niños y mayores ha ascendido a más de 18.000.