La Agencia Europea del Medicamento (EMA, en inglés) ha denunciado este miércoles haber sido víctima de un “ciberataque”, anunciando en consecuencia la apertura “inmediata de una investigación” en colaboración con la policía neerlandesa, ya que su sede se trasladó a Ámsterdam cuando el Brexit entró en vigor.

El organismo ha rechazado hacer públicos más detalles al respecto "mientras la investigación esté en curso”. Del mismo modo, no ha informado sobre si este incidente ha afectado al desarrollo de revisión que se está realizando sobre las autorizaciones de comercialización de las vacunas contra el coronavirus, concretamente las desarrolladas por las farmacéuticas Pfizer/ BioNTech y Moderna.

Tomando como referencia la nota de prensa publicada por la EMA, no se puede llegar a hacer una estimación de la gravedad del incidente, por lo que podría tratarse de un ataque fallido o un robo de datos referentes a las inyecciones contra el virus pandémico.

La directora de la agencia, Emer Cooke, hablará este jueves ante el Parlamento Europeo en Bruselas, para responder a las preguntas de los eurodiputados sobre el proceso de revisión de las licencias de uso de las vacunas más avanzadas, ya que se espera que apoye la de Pfizer/BioNTech antes del 29 de diciembre, y la de Moderna sobre el 12 de enero.

Cooke subrayó las dificultades “del teletrabajo” y la comunicación digital a la que están obligados todo el personal del organismo, lo que ralentiza sus labores y complica la gestión de la crisis sanitaria actual, según argumenta en una entrevista a EFE“Estamos trabajando muy duro para cumplir con las expectativas de la población europea”, asegura la directora sobre el proceso para aprobar el uso de la vacuna en territorio europeo.