En paralelo a los avances en el marco de los Presupuestos Generales del Estado 2023, el Gobierno se ha fijado como objetivo prioritario la articulación del Plan de contingencia de seguridad energético para afrontar el duro invierno que se prevé. Moncloa acumula reuniones y encuentros con industrias, empresas, comunidades autónomas y grupos parlamentarios para recopilar todas las propuestas y elaborar un “plan razonable”, en palabras de Félix Bolaños. Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, acompañó al ministro de Presidencia y a Rafael Simancas en la reunión con todos los grupos que integran el arco parlamentario. El Partido Popular estuvo presente, aunque según el PSOE, no participó de forma constructiva. ¿Colaborará el principal partido de la oposición en el diseño del plan?

Ribera aseguró que el encuentro fue edificante y supone un buen punto de partida para aquilatar el ya aprobado decreto de ahorro energético: “La reunión ha sido particularmente constructiva a la hora de intercambiar pareceres y estoy segura de que muchas de las ideas y propuestas que hemos compartido tendrán reflejo en el documento. En todo caso, vamos a seguir trabajando y colaborando”. Estimulante, sí, pero según Bolaños, no por la actitud del PP.

El diputado Guillermo Mariscal fue el representante del Grupo Popular, aunque según los socialistas, su presencia no se hizo notar. “Estuvimos dialogando e intercambiando impresiones. Hemos recibido propuestas por escrito de algunos grupos, pero no hemos contado con propuestas por escrito del PP. Vamos a seguir en ese intento de escuchar a todos los que quieran aportar”, ha censurado Bolaños este viernes.

Fuentes del Grupo Popular esgrimen que no lo hicieron porque Feijóo anunció hace unos días que presentará al Gobierno un plan de energía y, además, deslizan que preguntaron por el orden del día de la reunión para preparar documentación e informes de base y “se limitaron a señalar que el único punto a tratar era ‘plan de contingencia’”.

A vueltas con la energía

El próximo martes 6 de septiembre Sánchez y Feijóo se batirán en duelo en lo que será el primer cara a cara del curso político y el preludio de lo que se espera para lo que resta de legislatura. El presidente aceptó el envite del líder de la oposición y comparecerá en el Senado para explicar en profundidad los detalles del plan de ahorro energético y cómo habrán de gestionarlo las comunidades autónomas.

El formato no convence al PP pese a que fueron los que lo solicitaron, puesto que pretendían un debate más amplio que incluyera la situación económica y social. En otras palabras, una suerte de debate sobre el estado de la nación, pero en esta ocasión, en la Cámara Alta y con Feijóo como púgil en lugar de Cuca Gamarra.

Para recuperar la iniciativa, Génova reclamó a Moncloa que rebajara el IVA del gas del 21% al 5% y, apenas 24 horas después, Sánchez desactivó su argumentario asumiendo la propuesta como propia. En una entrevista en la Cadena SER, concretó que formaría parte del nuevo plan de contingencia y que se implementaría a partir de octubre y hasta el 31 de diciembre, con posibilidad de prorrogarse atendiendo a la situación.

Lejos de tomárselo mal, Feijóo se ha congratulado de que Sánchez hiciera suya la propuesta. En un acto en el que ha acompañado a Isabel Díaz Ayuso, se ha congratulado de que Moncloa le haya copiado y ha emplazado al Ejecutivo a seguir haciéndolo. "Voy a ofreceros el titular: estoy muy de acuerdo con la decisión de Pedro Sánchez de bajar el IVA de la luz y del gas, tan de acuerdo que lo llevo pidiendo seis meses continuados, todos los días, todas las semanas, porque es de sentido común", ha ironizado.