Continúa la histórica división de la extrema derecha política y mediática. La complicada situación política que enfrenta Vox, después de sus malos resultados tanto en las últimas elecciones generales como en las autonómicas de Galicia, donde no han conseguido representación parlamentaria y el Partido Popular ha cosechado una nueva mayoría absoluta, hace a la formación ultraderechista pensar que para poder subsistir en el ecosistema político español, remontar el vuelo y no desaparecer, necesitan de su propio aparato mediático desde el que poder influir.

Así lo cuentan fuentes internas del partido a ElPlural.com. Aunque lo cierto es que Vox ya tiene un buen número de medios de comunicación afines, su objetivo parece estar centrado en reforzar los mismos con nuevas inversiones, que se alejen, a su vez, de los grupos de la derecha mediática tradicional, que están, a juicio de Vox, "vendidos al Partido Popular", formación con la cual los ultraderechistas han tomado aún más distancia tras las elecciones gallegas.

El líder de Vox, Santiago Abascal, cerró la campaña de las gallegas asegurando que su partido no asumiría ninguna culpa en caso de que el PP tuviera un mal resultado, y se tomó la libertad de llamarles "lerdos" y de decirles que "se pueden ir a tomar por saco". "Son lerdos. Han repetido la misma estrategia que el 23J. En vez de dedicarse a hacer oposición al PSOE, están pensando en cómo hacer oposición a Vox", argumentó el líder de extrema derecha, evidenciando una ruptura que, aunque se siente principalmente en el plano político, le complica las cosas a Vox en los espacios mediáticos en los que el PP tiene una mayor presencia.

Diferentes posturas en el seno de Vox

Sin embargo, no todas las visiones son uniformes en el seno del partido. Por una parte, están los partidarios de la 'doctrina' de Kiko Méndez Monasterio, que es más partidario de mejorar las relaciones con los medios tradicionales y recuperar ese espacio, más que de distanciarse de él. Por otro lado, está la línea de Gabriel Ariza, otro de los más importantes asesores de Vox e hijo de Julio Ariza, presidente del grupo Intereconomía, que sostiene que es necesario reforzar los satélites mediáticos del partido para dar la batalla desde los mismos, teniendo, precisamente, a Intereconomía como un importante tronco central. 

En este sentido, Intereconomía le ha pegado un fuerte golpe a Libertad Digital (Federico Jiménez Losantos) con el fichaje de Luis del Pino, uno de los más afines profesionales al periodista de Orihuela del Tremedal. Del Pino aparecerá en El Toro TV y emitirá en la Radio Libertad.  "He estado vinculado al grupo Libertad Digital/esRadio casi 20 años, desde que Libertad Digital me publicara un primer artículo sobre la masacre del 11-M. Durante este tiempo, he podido trabajar con profesionales extraordinarios, algunos de los cuales se han convertido en magníficos amigos", escribía antes de agradecer personalmente a los que se han cruzado en su camino durante estos años.

"Quiero dar las gracias a todos esos compañeros con los que he compartido risas, ilusiones, entusiasmo, decepciones, cabreos y, sobre todo, una perpetua lucha por tratar de hacer de España un país mejor. Me voy con la satisfacción de haber aportado mi modesto granito de arena. Quiero agradecer a Federico, a Javier Somalo, a Dieter Brandau, a Luis Rodríguez y a todos los demás compañeros de esRadio/LD todos estos años extraordinarios. Es mucho lo que he aprendido de vosotros y mucho también lo que hemos compartido. Y os lo agradezco de verdad", decía, antes de fichar por la mayor competencia de Losantos y de unirse al paraguas mediático de Vox.

 

A su vez, fuentes del partido indican, tal y como publicó ElPlural.com, que la idea es acabar teniendo presencia en todo el aparato de Radio Intereconomía. En el plano autonómico y municipal, que es donde Vox tiene actualmente una mayor presencia, la formación está valorando incrementar su presencia publicitaria a través de cuñas y anuncios.

En cuanto a la prensa escrita, Vox también tiene su propio satélite: La Gaceta de la Iberosfera. En resumidas cuentas, lo que pretende Vox es mantener su conglomerado de medios afines y acaparar nuevos espacios, eso sí, con una financiación mucho mayor de la que disponen ahora. Un proyecto ambicioso, complicado de ejecutar y para el que tendrán que vérselas con los medios a los que ellos tachan de "vendidos" al Partido Popular.

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