Alberto Reyero, el que fuera consejero de Políticas Sociales de Ayuso durante la pandemia de la COVID-19, ha declarado este jueves como testigo, citado por el juez Arturo Zamarriego, en en el Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid sobre los protocolos que impidieron el traslado de ancianos de las residencias a los hospitales en los meses más duros de la crisis sanitaria, concretamente en el marco de la investigación de la muerte de tres ancianas. 

Antes de su declaración, ha reafirmado ante los medios de comunicación que los protocolos no eran morales. El expolítico y activista dimitió en octubre de 2020 de su puesto en el consejo del gobierno formado por PP y Cs tras denunciar la gestión del Ejecutivo en las residencias durante la crisis del coronavirus, cuando fallecieron más de 7.000 residentes

“Esta derivación debe basarse en criterios clínicos, que no discuto y que no me corresponde valorar. Pero considero al mismo tiempo que no deben existir unos criterios de exclusión basados en niveles de dependencia o discapacidad. No es ético y posiblemente no sea legal”, manifestó el entonces consejero en 2020.

El exdirigente de Ciudadanos siempre ha expresado que estos protocolos posiblemente podían ser ilegales y así lo ha defendido a su llegada a los juzgados argumentando que las personas que ocupaban las residencias “quedaron abandonadas a su suerte” durante la primera ola de la pandemia de COVID-19 por culpa de los protocolos de derivación implementados desde la Puerta del Sol. Este mismo jueves también ha declarado Carlos Mur, el alto cargo regional que firmó los protocolos de no derivación.

"Las personas quedaron abandonadas a su suerte"

El exconsejero regional ha recalcado que los protocolos de derivación fueron “de exclusión” y por ello “se excluía a las personas en función de su situación de dependencia o discapacidad”.  “Eso impidió que se les atendiera en los hospitales y ocasionó que las personas que se quedaron en las residencias fallecieran en unas condiciones que yo considero indignas”, ha subrayado. 

En relación con esas medidas, ha dejado claro que, además, “no hubo alternativas” a los ingresos hospitalarios, puesto que en el hospital creado en Ifema Madrid para afrontar la crisis sanitaria producida por el COVID-19 “no se atendió a personas de residencias” y tampoco “se medicalizaron las residencias”.

Reyero se ha respaldado en un informe de Amnistía Internacional y ha insistido que "realmente las personas quedaron abandonadas a su suerte”. Respecto a la responsabilidad de lo sucedido, ha señalado que eso no le atañe a él sino al juez, aunque sí ha apuntado que “se pueden sacar conclusiones” de todas las cosas que ha ido explicando tanto en comparecencias públicas como en su libro Murieron de forma indigna. “Yo creo que ya he dicho bastante”, ha sentenciado.

Ayuso, a Reyero: “Espero salga hoy imputado de sus declaraciones”

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha pronunciado en el último pleno de la legislatura en la Asamblea de Madrid respecto a las declaraciones de Alberto Reyero. La líder popular ha deseado que su exconsejero sea imputado por sus declaraciones en el juicio de los protocolos.

En el pleno, los partidos de la oposición del Gobierno del PP han recriminado los errores que a su juicio ha cometido desde el adelanto electoral de marzo de 2021. Con las elecciones municipales y autonómicas del 28-M a menos de una semana, Mónica García, la portavoz de Más Madrid, le ha recordado el drama de lo sucedido en las residencias durante la crisis sanitarias.

“En octubre del año pasado, usted dijo aquí que ni existieron ni se aplicaron los protocolos de la vergüenza. Hoy, el señor Mur, director general de su Gobierno, y el señor Reyero, comparecen en los tribunales obligados a decir toda la verdad, y antes de que la dejen a usted en evidencia, le ofrezco la última oportunidad para decir la verdad, reconocer que 7.291 mayores murieron de forma indigna, y pedir perdón”, reprochaba la líder de la oposición.

“Muchas gracias, señoría. Espero que el segundo señor que usted me menciona salga hoy imputado de sus declaraciones. Gracias”, ha respondido Ayuso.

“Si quiere que me imputen, que ponga una querella"

Reyero ha contestado tajante a Díaz Ayuso en conversaciones con El País: “Yo no se lo deseo. Es una contradicción. Si quiere que me imputen que ponga una querella. Entiendo que como juegan a la provocación, quieren embarrarlo todo”. Un intercambio de acusaciones entre la presidenta y su exconsejero que evidencian las malas relaciones que acabaron habiendo en el primer gobierno de coalición de la historia de la Comunidad del PP y Cs.