El rey emérito Juan Carlos I no viajará de nuevo a Sanxenxo, Pontevedra, como tenía previsto después de que se haya cancelado la regata programada para el sábado y el domingo por la previsión de mal tiempo. El emérito tenía previsto viajar esta semana a España, pero la cancelación de las regatas le ha llevado a cancelar el viaje.
Concretamente, el Club Náutico de Sanxenxo ha decidido suspender la regata que se iba a celebrar este fin de semana, entre el viernes y el domingo, por el paso del ciclón extratropical Óscar por Galicia, lo que dejará tormentas y lluvias intensas. Se trataba de una prueba del V Circuito de la Liga Española de la clase 6 metros, a la que el emérito había manifestado su intención de volver para asistir a la competición, de hecho estaba inscrito como patrón del Bribón, tal como han confirmado fuentes del club a Europa Press.
Aunque la visita de Juan Carlos I no estaba confirmada oficialmente, sí se esperaba su asistencia. Es más, durante la última estancia en Sanxenxo el pasado mes de abril ya había manifestado su intención de volver en junio para estas pruebas. No obstante, el anuncio de este lunes desde el Real Club Náutico de Sanxenxo de cancelar “por seguridad” la regata en la que iba a participar el Bribón, debido a “la inestabilidad meteorológica provocada por el paso del ciclón extratropical Óscar por Galicia”, termina por rematar las esperanzas del emérito para volver a suelo español en esta ocasión.
Los regresos a España
Esta hubiera sido la tercera vez que regresara a España desde que en agosto de 2020 Juan Carlos I abandonara el país que reinó para trasladar su residencia a Abu Dabi aturdido por la proliferación de informaciones que apuntaban a las ilegalidades en sus finanzas.
La primera vez que regresó fue en mayo de 2022, cuando el emérito mantuvo un intenso fin de semana en el mismo municipio pontevedrés que despertó el interés mediático, con los medios de comunicación persiguiendo sus pasos minuto a minuto. En esta ocasión, antes de emprender viaje a Abu Dabi paró en Zarzuela para reunirse en privado con su hijo, Felipe VI, y otros miembros de la familia.
La segunda fue el pasado mes de abril, cuando también viajó a Sanxenxo para asistir a la competición de regatas a bordo del Bribón pero sin reunirse con su hijo en Zarzuela ni nada por el estilo.
Aparición en Oriente Medio
Fue la semana pasada cuando el foco mediático se dirigió a Oriente Medio al ser escenario de la reaparición de Juan Carlos I y Sofía. Fue en el enlace matrimonial del príncipe Hussein, heredero al trono de Jordania, con la arquitecta saudí Rajwa Al Saif en el Palacio de Zahran. Pero aunque fueron muchos los rostros conocidos que asistieron a la ceremonia del heredero jordano, entre las que destacaban figuras como los Príncipes de Gales con Guillermo y Kate Middleton, en España resaltó la aparición conjunta de los propios reyes eméritos, Juan Carlos I y Doña Sofía.
Desde el funeral del hermano de la reina, Constantino de Grecia, no se les veía juntos. Ha sido en esta nueva cita en Jordania donde los reyes eméritos no han derrochado complicidad ni cercanía, sino lo contrario, pues el abismo, la distancia y la indiferencia marcaron esas horas en el palacio de Zahran de Ammán. De hecho, este lugar es particularmente especial para ambos, pues se trata del país en el que Doña Sofía y Juan Carlos I habían pasado parte de su viaje de novios en la capital jordana hace 61 años.
La familia real española ha protagonizado diferentes festejos últimamente, como la graduación de la heredera al trono, la princesa Leonor, o la más reciente, la confirmación de su nieta, la infanta Sofía. No obstante, aunque sí se ha visto a la reina Sofía, no ha sucedido lo mismo con Juan Carlos I, que se mantiene alejado de su familia, excepto con sus hijas, las infantas Elena y Cristina, quienes sí mantienen una relación cercana y viajan a menudo a Abu Dabi.
