¿Tienen alma los banqueros?, preguntó ELPLURAL.COM al padre Ángel. “Sí –contestó- pero irán al infierno. Lo que pasa es que el infierno no existe”. “¡Pues vaya consuelo!”, reiteró este periódico. Y el padre Ángel, creador de Mensajeros de la Paz, aclaró con asturiana socarronería: “Es que hay gente que ha nacido con buena estrella”.  Así empezó esta entrevista que transcurrió a saltos entre peticiones de ayuda, buenas noticias y mucha solidaridad.

Mensajeros de la Paz cuenta con 332 centros y proyectos para niños, para mayores, para necesitados de todo tipo, emplea a 3.900 trabajadores y atiende al día a 18.000 personas que lo precisan. Todo esto luchando con la deuda de las administraciones que no pagan las residencias de ancianos pero no perdonan (según ha averiguado este periódico digital) cobrar la parte proporcional de su pensión a los viejecitos. Y siempre con su fundador el padre Ángel viajando incansable a lugares en pleno conflicto, a veces jugándose la vida. Este cura ha conseguido que su ONG haya cumplido 50 años y desde su inicio en 1962 extienda hoy sus actividades a 47 países. En estos tiempos de crisis ha creado un banco solidario que excede en resultados a sus previsiones y diversos comedores sociales. Mientras, aún le sobra tiempo para viajar a Roma y contarle al Papa…Dios sabe qué.

P: Hablando de Roma ¿Cree que los obispos se preocupan de lo que está pasando?
R: Bueno, ahora que estuvieron reunidos los obispos en el Sínodo una de las preocupaciones mayores que deberían haber tenido aparte de evangelizar, que también es su misión, debería ser la crisis en la que vive Europa entera, que tengo que decir que no es de la familia ni de los valores, estoy en contra de esos conceptos, no es verdad.

P: ¿Por qué?
R: La familia no está en crisis y los que digan que hemos perdido valores o mienten o no saben de qué hablan. Claro, si creen que la familia consiste en la base del padre y la madre y casados por la Iglesia, bueno, vale. Pero no es así, la familia son los que viven juntos; los separados; los no casados; la suegra y madrastra… eso es familia y la crisis la está paliando la familia que además es quien está manteniendo los valores morales. Tenemos a flor de piel la solidaridad pero se empeñan en decir que España es Sodoma y Gomorra.

P: ¿Quiénes dicen eso?
R: los dirigentes políticos, los periodistas, los gobernantes, los listos. España no es Sodoma y Gomorra, yo diría que esto es el país de las maravillas porque en cualquier sitio hay un cura, un maestro, un medico, un familiar, un comedor de Cáritas que se ocupan de la gente.

P: Le veo indignado.
R: Indignado sí, de que en los momentos en que necesitas no engañar a la gente sean tan pesimistas; te dicen. Zapatero decía que no había crisis, pero Rajoy dice: “estamos mal y vamos a estar peor”. Y encima te lo dice todos los viernes en Consejo de Ministros. La verdad es que cada uno de estos viernes de Rajoy parece un viernes santo… ¡Ya podía cambiar de día para estos anuncios! Y oye, que nadie sale a decir “vamos a crear puestos de trabajo”. Parece que tienen alergia a las buenas noticias.

P: Algunos curas reclaman que este año de la Evangelización haya más acción con los colectivos que lo precisan y menos la teoría.
R: Claro, es que nosotros dentro de la Iglesia hemos nacido para bendecir a la gente, no para maldecir a la gente y a veces le sacamos los colores a la gente hablando de los pecados, de su estado emocional, como con los homosexuales o con las prostitutas. Les mandamos al infierno, cuando hemos nacido para bendecir.

P: Pues pasamos a los bancos. ¿Cómo los define?
R: Ellos mismos se han retratado. A mí de pequeño me decían que los bancos eran unos usureros y yo no sabía lo que querían decir. Significaba que ganaban demasiado. Antes nadie les decía nada cuando ganaban, ahora cuando pierden, les ayudan. No podemos criticar los actos de los políticos con los bancos, porque los que no entendemos no podemos responder cuando nos explican que si los bancos se caen, se cae toda la economía. Pero lo cierto es que uno ve un banco y mira para otro lado. Mira, yo creo que deberían repartir lo que tienen. Igual que pedimos que se vendan edificios o iglesias para dar dinero a pobres, también podemos pedir que lo hagan los bancos que tienen los mejores edificios de este país.

P: Claro, pero además ejercen de malos, con temas como los desahucios.
R: Creo que se están arrepintiendo de los desahucios. Desde luego se les tiene que caer la cara de vergüenza. Como ya se han suicidado algunas personas desahuciadas, igual eso sirve para que hagan caso. Pensar en quienes están pagando un piso a módicos plazos y se quedan sin él… Eso nos tiene que romper el alma a todos.

P: ¿Los banqueros tienen alma?
R: Sí que tienen alma los banqueros, pero irán al infierno. Claro que el infierno no existe.

P: ¡Vaya consuelo!
R: Es que algunos nacen con buena estrella. Pero algún castigo deben tener. Aunque no hay que desearle el mal a nadie.

P: En cuanto al rescate ¿qué me dice?
R: Que no hay que tener tanto miedo al rescate. El rescate en suma consiste en pedir un préstamo y pagarlo después. También para explicarlo bien hay que ser entendido en el tema, pero yo lo veo así y veo que el problema radica en que para pedir hay que humillarse y no quieren humillarse. A ningún político le gusta humillarse. Pero les humillaremos en las elecciones.

P:¿Ha visto llorar a algún abuelo por los efectos de los recortes?
R: Sí, he visto llorar a más de un abuelo. Y te cuento: me encontré a un niño de estos comedores que hemos montado aquí en la sede de Mensajeros en Madrid, que estaba cenando y envolvía una salchicha en una servilleta de papel. Le pregunté para quién era y me dijo: “es para mi abuelo que no ha comido nada hoy”. Esta es la España que tenemos y no puede negarlo nadie. Lo malo es que en el Congreso, en el Senado, en los Parlamentos autonómicos, no veo a ningún político pronunciar las palabras “pobreza y hambre”, parecen palabras prohibidas por los partidos.

P: Ustedes atienden a muchos mayores y niños. ¿Están las administraciones retrasando los pagos?
R: Las administraciones retrasan los pagos, con lo que nos ahogan a veces. Estamos viendo muchas cosas y muy tristes. Y estamos esperando a que esto se aclare e intentando mentalizar a los políticos de que no hagan recortes en las pensiones, en la educación, en la sanidad. Debemos ser valientes y decir que no, aunque seamos incómodos.

P: Esta experiencia del banco solidario de “deja lo que puedas, coge lo que necesites”, ¿cómo está marchando?
R: El banco solidario nos ha sobrepasado. Ya tenemos problemas de almacenar y de gente con quien compartir la solidaridad a flor de piel Cuando mas dificultades hay encuentras mas apoyo en la gente. Pulse aquí para conocer el banco solidario de Mensajeros de la Paz.

P: Y desde su experiencia, ¿qué futuro ve?
R: Creo que estamos mejor hoy que ayer en contra de lo que diga Rajoy y el jefe de turno. Esto tiene esto arreglo. Necesitaremos 5, 10 o 20 años para volver a tener la base de bienestar que hemos perdido. Mucha gente ha perdido su vivienda, pero no hemos perdido bienestar social, aun podemos gritar, ir al médico; no nos han sacado los militares a la calle para callarnos la boca… Debemos estar preocupados, pero es distinto ver por ejemplo en Madrid la calle limpia o el metro funcionando, que salir a la calle en Haití donde no hay higiene y tienes un paisaje de edificios destruidos.

Mientras habla el padre Ángel, suena el teléfono. Es una buena noticia: El Ayuntamiento piensa ceder un edificio para un nuevo sistema de comedor social. “Pero con delicadeza –explica a su interlocutor Ángel García- hay que tener delicadeza para dar. Es fundamental”.