La Junta Directiva Nacional del Partido Popular se reúne este martes en su sede en el número 13 de la madrileña calle de Génova para encauzar la crisis interna que ha puesto en jaque a la formación y ha acabado con el liderazgo de Pablo Casado tras su batalla contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Es en la reunión de este martes cuando se fijará la fecha en la que tendrá lugar el XX Congreso Nacional, de carácter extraordinario y en el que se elegirá al próximo presidente.

Se prevé que Casado aguante hasta el congreso, preseñalado para los días 2 y 3 de abril, fecha en la que el actual líder popular se despedirá y al que ha prometido no presentarse como candidato. Lo hizo en la reunión mantenida con los barones territoriales el pasado miércoles y que duró más de cuatro horas. Fue donde Casado, pese a la falta de apoyos entre sus propias filas, se impuso a los barones, se negó a dimitir -como si había hecho su número dos, Teodoro García Egea-, y convocó el congreso anunciando que permanecería en el cargo hasta entonces. Horas antes, a primera hora de la mañana, el líder del PP había pronunciado un mensaje en el Congreso de los Diputados en claro tono de despedida.

La Junta Directiva es el máximo órgano de dirección del PP entre congresos y se celebra habitualmente cada cuatro meses, salvo en casos excepcionales como el actual. Este órgano tiene la potestad de convocar el congreso nacional del partido, tanto ordinario como extraordinario, que es lo que se le llevaba pidiendo a Casado en las horas más crudas de la guerra interna en el PP detonada por el supuesto espionaje desde la dirección nacional a la presidenta madrileña con el objetivo de hacerle desistir de sus intenciones de presidir el PP de Madrid.

Está compuesto por alrededor de 400 miembros del PP, y puede llegar a supurar el medio millar incluyendo los principales cargos públicos e institucionales. Así, se reúne a todos los diputados, eurodiputados y senadores afiliados, además de los presidentes autonómicos de la formación.

Feijóo, el favorito para sustituir a Casado

Ante la debacle de Pablo Casado, el favorito para dirigir la formación a nivel nacional es Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta de Galicia, aunque se ha querido mantener cauto y no dar el paso de anunciar su candidatura, pese a que sí ha conseguido el respaldo de muchas del PP, como presidentes como Isabel Díaz Ayuso.

El también presidente del PP de Galicia ha pedido “respetar los tiempos” y ha asegurado que anunciará su decisión a partir del miércoles, cuando la Junta Directiva haya tenido lugar. “Anunciaré mi decisión, mi posición, pero vamos a respetar los tiempos del congreso y la legitimidad de la Junta Directiva”.

Feijóo y cualquier otro candidato que aspire a la presidencia del PP dispondrá de un plazo hasta mediados de marco para presentar su candidatura al congreso extraordinario. Pero este paso se deberá completar con el aval de al menos cien afiliados del partido.

La presión a Casado

Fue el pasado lunes cuando Pablo Casado se dio cuenta a puro golpe con la realidad de que su círculo más cercano le daba la espalda. Una buena parte de sus vicesecretarios generales le exigió que convocara la Junta Directiva y accediera a un congreso extraordinario. De no hacerlo, le amenazaban con sus dimisiones.

Entre estas personas había pesos pesados de la formación y del entorno del propio presidente, como Cuca Gamarra, Javier Maroto, Andrea Levy, Ana Pastor y Dolors Montserrat.

La presión también recayó sobre el número dos, Teodoro García Egea, que terminó optando por la dimisión pese a su negativa en unos primeros momentos. Es a éste a quien muchos señalan como el responsable de lo ocurrido y de la disputa entre Casado y Ayuso en los últimos meses. Lo que se previó como una detonación controlada en forma de filtración de un supuesto espionaje y los cobros de comisiones del hermano, ha terminado con el fin de la etapa de Casado al frente del partido.