Con la espalda de la amplia mayoría de los barones del PP y las dimisiones que han ido sucediéndose desde que estallara la guerra interna en el seno del partido la pasada semana, Teodoro García Egea, número dos de Pablo Casado, ha presentado su cese a su presidente.
Aunque en un primer momento ha descartado su dimisión y se ha resistido, Egea ha terminado acatando la orden que habría recibido de Pablo Casado pidiéndole su dimisión. El líder popular le ha pedido la dimisión al secretario general del PP y éste ha terminado por aceptar cuando los apoyos se han reducido prácticamente a la nulidad. Mientras, Casado sigue luchando por mantener su liderazgo en la formación, aunque fuentes del PP aseguran que tendrá que terminar dimitiendo, igual que su número dos.
Pablo Casado ha tomado esta dura decisión sobre Egea tras las dos grandes traiciones que ha soportado este martes. Se trata de Cuca Gamarra, portavoz del PP en el Congreso de los diputados, y de Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia. Estas han sido de las últimas figuras que han quedado apoyando al líder popular, pero que finalmente han terminado por exigirle la convocatoria de un congreso extraordinario y la toma de decisiones contundentes y urgentes.
Tal como aseguran algunos medios, Casado está buscando “una salida digna” del partido. “No sé por qué me tengo que ir. No he hecho nada”, ha dicho Casado en una conversación con uno de sus dirigentes afines a las tres de la tarde, tal como ha informado El País.
Casado se cita con los barones
El presidente del Partido Popular ha convocado en estas horas flojas que está viviendo a todos los barones de su partido a una reunión este miércoles. Casado ha convocado a los barones territoriales, pero ha dejado fuera a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Se espera que tras esta reunión será cuando Casado anuncie su dimisión.
Ha convocado esta reunión obligado por la propia directiva del partido, como paso previo a la convocatoria del congreso. La mayoría de los dirigentes que conforman la cúpula, a excepción de Pablo Montesinos, Antonio González Terol, Ana Beltrán y el propio García Egea, exigió la celebración con carácter de urgencia de un congreso extraordinario y algunos han amenazado con dimitir de no convocarse.
