La “Matanza” de Badajoz se recuerda cada 14 de agosto para que no caiga en el olvido uno de los genocidios más crueles que protagonizó el franquismo de la mano del sádico coronel Yagüe, el "Carnicero de Badajoz", quien luego fue premiado con el ministerio del Aire por el dictador.

La Columna de la Muerte de Yagüe 

Ese día, pero del año 1936, comenzó una etapa de violencia criminal e indiscriminada contra la población y que, en su cómputo global, segó la vida de miles de extremeños, algo que nunca se ha olvidado en la ciudad. La Columna de la Muerte, dirigida por Yagüe, evidenció ante el mundo, y fueron muchos los periodistas extranjeros que lo reflejaron, que lo que Franco ponía en marcha era toda una  política de exterminio del enemigo político, planificada, estudiada y organizada. Tras la Batalla de Badajoz fueron miles las personas sobre las que cayó la represión, el asesinato y la tortura del Ejército golpista tanto contra población civil como contra militares de la República española.

"La sangre corría como ríos por las calles de Badajoz"

Los historiadores coinciden en el altísimo número de fusilados tras la caída de la ciudad aunque el número oscila entre las casi 2.000 a 4.000. Los calificativos que se atribuye a la matanza de Badajoz van desde “crimen contra la humanidad” hasta “genocidio”. Entre el 14 y el 15 de agosto de 1936 fueron fusilados miles de personas de una población de poco más de 40.000 habitantes. Los periodistas extranjeros dieron testimonio de que “la sangre corría como ríos por las calles de Badajoz”. Se realizaron miles de ejecuciones en masa en distintas zonas de la capital pacense y las calles aparecían sembradas de cadáveres.

Del sadismo de Yagüe, en una estrategia asesina ordenada por los gerifaltes golpistas, da fe sus declaraciones a periodistas de otros países: “Ha sido una espléndida victoria. Vamos a terminar la limpieza de Extremadura ayudados por los falangistas”. “Naturalmente que hemos matado. ¿Qué suponía usted? ¿Que iba a llevar cuatro mil prisioneros rojos con mi columna teniendo que avanzar contra reloj? ¿O iba a dejarlos en la retaguardia para que Badajoz fuera rojo otra vez?”.

Una coalición del PP, Ciudadanos y un ex VOX

Por todo ello parecen increíbles las declaraciones de políticos actuales que gobiernan en el Ayuntamiento de Badajoz. La capital está gobernada por PP, Ciudadanos y un concejal que lideró la lista de Vox, se dio de baja y se integró en el equipo de Gobierno. Se trata de Alejandro Vélez, concejal de Limpieza Viaria, Poblados y Parque Móvil. Ahora, el alcalde es el popular Francisco Javier Fragoso y, a mitad de legislatura, asumirá la alcaldía Ciudadanos. Tanto para el mantenimiento del actual equipo de Gobierno como para el previsible con regidor naranja, el voto de Alejandro Vélez es indispensable.

Militante de Democracia Nacional y Manos Limpias

Vélez es conocido, además de por sus ideas ultras, por haberse presentado como candidato, en distintas elecciones y localidades, en seis ocasiones con Democracia Nacional y en estos últimos comicios por Vox.

Entre 2003 y 2011 se presentó al Congreso, a las elecciones europeas y a las municipales por Badajoz, Almendralejo y Talayuela. En 2015 fue segundo en la candidatura de Partido por la Libertad Manos Limpias en Almendralejo. Su lema de campaña en esa convocatoria fue "Que no te toquen los huevos, primero los de casa".

"Proclamamos la liberación de las garras comunistas"

Este personaje político protagonizó una fuerte polémica este pasado 14 de agosto, conmemoración del inicio de la matanza de Badajoz, generando un fuerte y tenso enfrentamiento en el pleno municipal de la capital pacense cuando comenzó su intervención afirmando que era un "día histórico" por la aprobación del presupuesto, pero también "un día histórico para la ciudad de Badajoz en el que proclamamos la liberación de las garras comunistas". Ante ello, la concejala del Grupo Municipal Unidas Podemos, Erika Cadenas, respondió duramente al ex edil de Vox espetándole: "Siento vergüenza y repugnancia" al escuchar comentarios "fascistas".

Después, la redes salieron a criticar esas declaraciones del concejal de extrema derecha, socio de Gobierno y muleta del PP y Ciudadanos en el Consistorio. 

Unas palabras que si legalmente tendrían difícil encaje en los delitos de odio, sí que, al menos ética y moralmente, desprenden el más vil de los sentimientos ante un hecho que provocó que casi el 10 por ciento de sus paisanos fueran pasados por las armas por pensar de otra manera.

Un concejal adicto a la grosería en redes

Por cierto, el edil ultra ya atacó de manera grosera a esta concejala de Unidas Podemos desde su cuenta de Twitter. El pasado mes de abril le “dedicó” este soez y repugnante tuit que retrata al personaje: “Ningún cagado se huele, dice el dicho…en este caso cagada. Mírese sus bragas podemitas y verá que le huelen a democracia secuestrada por el socialcomunismo. Qué bien se está sin perder el tiempo en escuchar en los plenos sus rollos trasnochados”. Este edil neofranquista tiene todo un abanico de perlas desde sus cuentas de Facebook y Twitter para con claros tientes de discursos de odio.