¿Qué espera de las comparecencias de Arenas, Álvarez Cascos y Cospedal?, le han preguntado este martes a Alfredo Pérez Rubalcaba, que veranea en Asturias. “La Justicia tiene que cumplir su trabajo y es lo que está haciendo”, ha respondido el líder socialista, que a continuación ha recordado que en este asunto hay un “trasfondo político” que se concreta en que “más allá de los que digan en los tribunales, el presidente del Gobierno compareció hace pocos días a rastras en el Parlamento español (...) para decir muchísimas mentiras; hoy sabemos que dijo más de las que en aquel momento denunciamos. Y esas mentiras no pueden quedar impunes. Que el presidente vaya al Parlamento y mienta es algo que los socialistas no vamos a permitir”.

 

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en Villar de Vildas (Asturias). EFE



En Somiedo, donde se ha encontrado con la prensa, Rubalcaba ha remachado que, al margen de la actuación judicial sobre el caso Bárcenas, “aquí hay una serie de responsabilidades políticas que se tienen que dirimir en el Parlamento, empezando por el conocimiento de la verdad”. En ese sentido ha recordado que su grupo ha pedido una comisión de investigación en el Parlamento para “que se sepa la verdad de un caso que es de financiación ilegal, de contabilidad B, de sobresueldos y hoy sabemos también que de nóminas y de mantenimiento, a pesar de lo que dijo Rajoy, del señor Bárcenas en la estructura del PP”.

Sobre las tensiones en torno a Gibraltar, el secretario general del PSOE ha insistido en sus declaraciones anteriores:  el apoyo del PSOE al Gobierno ante un asunto que es “un tema de Estado”, pero también el recordatorio a Londres y a Madrid de que “es mucho mejor el diálogo exigente que las amenazas a través de los medios de comunicación", y la petición de que abandonen las estridencias, "que ya sabemos que el verano es muy agradecido, porque toda estridencia acaba ocupando páginas y páginas de los medios, pero que este es un asunto que hay que resolver en la mesa de diálogo”.

Sobre este asunto ha pedido también al Gobierno español que sea “cauteloso, porque hablar de según qué aventuras al final te lleva al ridículo. Decir que vamos a ir de la mano de Argentina para reivindicar al mismo tiempo las Malvinas y Gibraltar es una ocurrencia en la que no debemos continuar".