El Gobierno calcula que, para 2026, los ingresos públicos alcanzarán la cifra récord de 704.391 millones de euros, frente a los 611.907 millones de euros estimados para este 2023, lo que elevará el porcentaje de ingresos públicos sobre el PIB desde el 43,4% de 2023 al 43,8% en 2026. Estos datos se reflejan en el Programa de Estabilidad 2023-2026 que el Gobierno ha remitido a la Comisión Europea, en el que se incorporan las perspectivas macroeconómicas y fiscales para dicho periodo.

El Gobierno ha remitido este viernes el informe a la Comisión Europea, en línea con el compromiso de todos los estados miembro de hacerlo antes del 30 de abril. Con estas proyecciones se pretende establecer las estimaciones del déficit y deuda pública sobre las que el Ejecutivo debería empezar a confeccionar los Presupuestos del próximo año, algo que en esta ocasión será distinto a otros años por la celebración de las elecciones generales, que se esperan para finales de año.

Fue el pasado jueves cuando el Ministerio de Asuntos Económicos adelantó su compromiso de rebajar el objetivo de déficit al 3% del PIB en 2024, un año antes de lo previsto en la anterior senda, con el fin de cumplir las reglas fiscales europeas que volverán a estar vigentes el próximo año. Nadia Calviño, vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, aseguró que ésta se trataba de “una noticia importante” que confirma “el fuerte compromiso del Gobierno con la responsabilidad fiscal”.

De esta forma, el Ejecutivo proyecta una recaudación por impuestos de 359.080 millones de euros para este año, con un crecimiento del 8,8% sobre 2022, aunque más moderado que el 11,4% logrado sobre 2021. El Gobierno espera que este "dinámico" crecimiento de los impuestos se mantenga hasta 2026, pero con "una progresiva ralentización".

Así, calcula que se alcanzarán tasas de crecimiento de los ingresos fiscales del 7,4%, del 5,2% y del 4,9% para 2024, 2025 y 2026, respectivamente, lográndose al final del periodo un montante de 425.240 millones de euros, frente a los 385.499 millones de euros de 2024.

Esta proyección conllevará un aumento de la ratio de impuestos sobre el PIB del 25,8% al 26,5%. No obstante, el Gobierno precisa en el Programa de Estabilidad que esta senda de ralentización del crecimiento de los impuestos coincide con el perfil cíclico del PIB, tanto en términos reales como nominales.

1,1 millones de empleos hasta 2026

Entre las principales novedades que destaca el Gobierno está el seguir siendo un motor del crecimiento económico, que sumará 1,1 millones de ocupados más hasta 2026, adicionales al millón creado después de la pandemia del coronavirus y que, en palabras del ministerio económico, “permitirá alcanzar niveles récord de ocupación”.

“El dinamismo de la actividad y la reforma laboral están llevando a un fuerte crecimiento del empleo, más estable y de mejor calidad. La ocupación registró en 2022 su mayor crecimiento en 15 años, mientras la tasa de temporalidad se ha reducido con rapidez y se acerca ya a la media europea”, recalca el Ejecutivo en el documento remitido a la Comisión Europea.

Así, se prevé que el desempleo siga en la senda descendente de aquí a 2026: la tasa de paro cerrará en 2023 en el 12,2%, se reducirá en 2024 hasta el 10,9%, en 2025 al 10,3% y al 9,8% en 2026.

Esta fortaleza del mercado de trabajo, unida al aumento del consumo y las inversiones y reformas, harán que el crecimiento del PIB español se sitúe a la cabeza de la Unión Europea, según el Ejecutivo.

De esta forma, el repunte se mantiene en el 2,1% en 2023 y en el 2,4% en 2024. “Nuevamente liderada por el despliegue del Plan de Recuperación, que compensaría el impacto negativo del tono contractivo de la política monetaria”, señala el ministerio. No obstante, en el documento remitido a la CE, en la fase final del plan se moderará el crecimiento: en el 1,85 y 1,7% en 2025 y 2026, respectivamente.

Entre las otras previsiones que se han hecho, fuera del Ejecutivo central, destacan la de la propia Comisión Europea, que asegura que la economía española crecerá un 1,4% este año; la del Banco de España, que estima que España crezca un 1,6% y la del Fondo Monetario Internacional (FMI), que eleva el crecimiento español hasta el 1,5%.

Así, se prevé que el desempleo siga en la senda descendente de aquí a 2026: la tasa de paro cerrará en 2023 en el 12,2%, se reducirá en 2024 hasta el 10,9%, en 2025 al 10,3% y al 9,8% en 2026.