Dos diputados a cambio de deudas y reducción de escaños para el resto de fuerzas de la izquierda. La idea de Íñigo Errejón chocó con la realidad. Más País diseñó una campaña pensada para sacar más de siete diputados, el mínimo que se barajaba internamente.

Sin embargo, el partido nacido para desbloquear atrajo poco “voto diferente para que sucedieran cosas diferentes”. Tratando de desvincularse de la mala praxis negociadora mostrada por socialistas y morados en la anterior legislatura fallida, la hoja de ruta de Más País se centró en explicar que sus contrarios habían caído en la trampa de obcecarse en sus intereses particulares por encima del interés general. Pero quitar votos a Unidas Podemos sin diferenciación programática y menos recursos es complicado. También lo es quitárselos al PSOE.

Esta falta de perfil propio y de capacidad de proyección sentenció a Más País. La estrategia siempre es mejor medirla cuando los resultados han hecho caer el mazo. Ahora, el problema no es solo orgánico, debido a que la marca no consiguió grupo parlamentario propio, sino que concejales y dirigentes internos de la formación en Madrid deberán abrocharse el cinturón y destinar un porcentaje mayor de su sueldo a pagar la deuda acumulada en la campaña y la precampaña de cara a las elecciones generales del 10 de noviembre.

Un problema financiero en toda regla. Tal y como recoge eldiario.es, el partido de Íñigo Errejón gastó 550.000 euros para financiar sus actos, mítines, desplazamientos y merchandising. Más de medio millón de euros que se consiguió gracias a los 350.000 euros cosechados a través de la campaña de microcréditos impulsada por la marca.

Aquella campaña, similar a la de Unidas Podemos -que superó los dos millones de euros- y la del PSOE -rondó los cinco millones-, ya planteaba una serie de dudas. El partido fue incapaz de conseguir el objetivo monetario que se habían fijado, perdiendo fuelle con el paso del tiempo y demostrando que la estructura de un partido que solo había concurrido por Madrid era incapaz de luchar de tú a tú con sus rivales.

Pero si la recaudación previa fue insuficiente, la subvención pública que recibirá la formación enciende todas las alarmas: 201.016 euros serán los que reciba Más País, menos de la mitad de la deuda que acumula y de la que deberá rendir cuentas muy pronto.