Uno de los axiomas indiscutidos de esta campaña para elegir secretario general del PSOE es que el socialismo andaluz apoya masivamente a Pedro Sánchez. La razón, el desencuentro entre Susana Díaz y Eduardo Madina, compañeros en el partido desde que ambos militaban en las Juventudes socialistas, pero que nunca fueron amigos. Menos desde que el ahora candidato rehusó dar un paso al lado y 'permitir' la elección de la líder andaluza por 'aclamación' como quería un buen número de los denominados barones.
La recogida de los avales vino a confirmar esta situación, aunque oficialmente desde la dirección socialista andaluza se niega haber 'tomado partido' en favor de ninguno de los candidatos. Por eso Madina puso tanto empeño en que se conociera la procedencia territorial de los avales de cada uno.
Este jueves por la mañana, Eduardo Madina y Alfonso Guerra han tenido un encuentro. Se han visto en el Congreso de los Diputados. Pero no en uno de los despachos de cada uno de ellos. Se han visto en los salones y los pasillos. Es decir, han hablado y se han visto enfrente de todos los periodistas y los cámaras.
Con todo esto resulta evidente el mensaje de estas fotos: no todo el socialismo andaluz está contra Madina. Hay un grupo, el guerrismo, que especialmente en Sevilla no es despreciable, que le prefiere. A falta de una jornada para cerrar la campaña, que por cierto Pedro Sánchez va a cerrar en la capital andaluza, evidentemente, no es este encuentro un gesto vacío.
La recogida de los avales vino a confirmar esta situación, aunque oficialmente desde la dirección socialista andaluza se niega haber 'tomado partido' en favor de ninguno de los candidatos. Por eso Madina puso tanto empeño en que se conociera la procedencia territorial de los avales de cada uno.
Este jueves por la mañana, Eduardo Madina y Alfonso Guerra han tenido un encuentro. Se han visto en el Congreso de los Diputados. Pero no en uno de los despachos de cada uno de ellos. Se han visto en los salones y los pasillos. Es decir, han hablado y se han visto enfrente de todos los periodistas y los cámaras.
Alfonso Guerra y Eduardo Madina sentados en un salón del Congreso de los diputados. Foto Flickr de Madina
Con todo esto resulta evidente el mensaje de estas fotos: no todo el socialismo andaluz está contra Madina. Hay un grupo, el guerrismo, que especialmente en Sevilla no es despreciable, que le prefiere. A falta de una jornada para cerrar la campaña, que por cierto Pedro Sánchez va a cerrar en la capital andaluza, evidentemente, no es este encuentro un gesto vacío.
